Para muchos sectores de la
ciudadanía, lo de Chavín de Huántar
como escandalete pestilente es digno de rechazarse por donde se le vea y la
prueba más grande de la ineptitud y torpeza en la que cayó el Gobierno de Humala que quería tapar el sol con un solo dedo y negar,
a como de lugar, un hecho indiscutible: la ejecución extrajudicial del terrorista Eduardo Cruz Sanchez (a) Tito, durante la liberación de los rehenes del interior de la
Embajada de Japón. Las de los otros delincuentes, Victor Peceros Pedraza y Luz Meléndez Cueva, están completamente descartadas.
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La acusación directa, de los críticos de amplios núcleos de la
población, es la siguiente: los representantes del Ejecutivo, pecaron por completo,
en su cometido espurio de atentar por completo en contra de la verdad de los
hechos, tratando de influenciar en la sentencia final del juicio correspondiente y vulnerando, por
completo, la independencia de poderes del estado y otras perlas más que atentan,
por decir lo menos, contra la ética y la transparencia.
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A Claro Clarísimo le llama la atención que este metido en el lío el
Ministro de Defensa, Pedro Cateriano Bellido, un personaje de carácter que ha
demostrado, en distintos actos de su vida política, un servicio intachable a
favor de la democracia, enfrentando con valentía a los estragos de la
corrupción fujimorista y las deficiencias nefastas del aprismo alanista.
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Merecería la pena que el abogado que ha sido
del Fredemo de Mario Vargas Llosa, de
quien es muy amigo, Congresista, Vice Ministro
de Justicia con Fernando Olivera de
Ministro durante el gobierno de Toledo, explique,
minuciosamente, sus razones de actuación como Procurador del Estado en este
caso para reafirmar su honorabilidad. Lo necesita.
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Por su parte el Premier, Juan Jiménez Mayor, cuando se grabaron
los audios Ministro de Justicia, afirmó que tan sólo se realizaron coordinaciones normales sin ningún objetivo
ilegitimo y con mucho interés para defender el Perú.
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Esta posición frente a los escépticos y los
desconfiandos es poco creíble. Muy inocente cuando hay tanta
oscuridad de por medio. El Jefe del Gabinete, frente a la ciudadanía,
también tiene que ahondar más para
convencer. Salvo que no le interese y ya tenga previsto su alejamiento del
gabinete. Corren rumores en ese sentido. Humala
le habría pedido la renuncia.
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No olvidemos, eso sí, que los
detractores del Gobierno están denunciando
que se planeó una defensa amañada y preñada de mentiras y falsedades
ante la Corte Interamericana de San
José para salvarse por completo de
cualquier sanción que a nivel
internacional tiene, indiscutiblemente, mucho peso y consecuencia negativa para
el Perú. Incluso con certificados periciales controvertidos.
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Francamente no creemos que Cateriano y Jimenez hayan podido
prestarse a ello. Si lo hicieron, evidentemente que existe la obligación de probárselo. Lo otro sería, por donde se le mire,
difamación. Es decir, un acto delictual, injusto e ilegitimo. La responsabilidad política
si la tienen.
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Completamente cierto es que los
jueces, Cesar San Martín y Carmen Rojassi
Pella, actuaron con torpeza supina. Nunca debieron asistir a tal reunión.
Ni menos ponerse a órdenes de los señores del Ejecutivo, quienes-se asegura
con precisión pero sin pruebas, a toda
vista- actuaban con cartas bajo la mesa y muy pero muy mal.
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Hay hechos que favorecen, por
completo, a los magistrados. El primero, evidentemente su capacidad, prestigio
e integridad de honestidad y de honradez que ambos tienen y mostrada, con
creces, a lo largo de sus valiosas vidas profesionales. Que valen, si valen.
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Por ello mismo es que nadie
concibe en qué momento aceptaron la invitación del Ejecutivo para tratar el
tema de marras. San Martin muy solicito,
detallista y mostrándose condescendiente, Rojassi tratando de justificar sus actuaciones
y prestándose al juego.
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Cuando, por principio, no tenían
que hacerlo ante nadie con poder. Sino actuar y quedar tranquilos con sus
conciencia y sus fallos, sin explicación alguna de por medio. Eso hubiese sido,
definitivamente, lo óptimo.
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Lo que si lo salva por completo y
ello amengua el lio en si es que la sentencia de la jueza no es, precisamente, lo que quería el
Gobierno. Muy por el contrario, el fallo es adverso a lo que se pretendía. San Martin se salva al firmar el
documento en la instancia superior, la de la Corte Suprema.
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Esto hay
que tomarlo en cuenta para el desenvolvimientos de los hechos y las
sanciones correspondientes que al parecer no tiene mucho asidero y respaldo
legal para sancionarlas y por ende ejecutarlas, según la opinión de los
entendidos.
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Uno de los que más conoce el tema
es el abogado penalista César Azabache
Caracciolo que, en posición justa, serena y transparente reconoce los
errores de los magistrados, sin dejar de
lado sus valías profesionales.
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Pero da el jurista, inmediata y
concienzudamente, una salida para ellos de
disculpas públicas a fin de acabar con el entuerto. Coherente la salida de Azabache porque, precisamente, de
ninguna manera, se presta para contribuir con el circo entregando carne para
los leones que quieren embutirse y tragarse a dos personas dignas como San Martin y Rojassi.
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La seriedad de Azabache es encomiable e incluso lo
muestra con respaldo de conocimiento y profundidad al haber colgado últimamente
un blog en Internet donde explica claramente lo que fue, es, y será con sus respectivas consecuencias el
Caso de Chavin de Huantar. Lo pueden ver bajo el titulo “Papeles de Trabajo” en la siguiente dirección electrónica http://cesarazabache.wordpress.com. Vale la
pena.
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Lo enteramente lamentable es que estos asuntos
turbios se sepan por la via ilegal y
delicitual: la grabacion anónima, cobarde y prohibida.
Como lo chuponeos telefónicos de los últimos tiempos. Precisamente, el método
tan deplorable y rechazable que instauró el más grande de los delincuentes y
ladrones que hemos tenido en los últimos tiempos de finales del siglo pasado
hasta el 2001, año que cayó preso para pagar por sus innumerables delitos: Vladimiro Montesinos Torres. El incluso perfeccionó el sistema poniendo
videos. Zamarro
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Las
habilidades del “Doc” tienen permanencia y, lo que es peor, vigencia total. Eso es lo que hay que desterrar
con disposiciones legales severas que eviten estos actos que son enteramente
reprochables. De eso poco se habla cuando es tan importante como remedio y antídoto.
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Que la prensa agarre los videos y
audios para destaparlos y denunciar actos oscuros e ilícitos, evidentemente que
es legitimo y enteramente necesario. Por una razón muy concreta, pero de peso: si no lo hace, nadie los conoce.
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Entonces, los actos impunes nunca se descubren.
La sociedad se carcome por dentro, sin enterarse de la verdad. Eso es
completamente malo para la vida de los pueblos. La evidencia, bajo cualquier forma, es completamente necesaria para la ética
y la moral de un país.
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Lo que hasta ahora no se sabe son las razones por
las cuales el Gobierno de Humala quiso
tapar la ejecución extrajudicial. Ni los motivos que lo llevan para ello. A quiénes
se quiere contentar. Muchos aseguran que hay
intereses turbios de la peor especie, provenientes de nefastos órganos
castrenses de inteligencia completamente tenebrosos que quieren marcar un
compás de delincuencia impune.
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Eso sí que sería nefasto y
estamos seguros que los altos mandos de las Fuerzas Armadas que nos merecen el
mayor de los respetos, de ninguna manera,
se prestan a tal barbaridad y si efectivamente hay un atisbo de ello, lo
cortarán por completo en el futuro.
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El Ejército, la Marina y la Aviación, como
cuerpo primordial de defensa para la patria, sobre todo contra el terrorismo,
merecen el respaldo permanente de la
ciudadanía. A nuestros soldados
oficiales y soldados hay que apoyarlos. Pero a esos de la inteligencia bruta y nefasta, si están actuando mal, inutilizarlos por completo. Simplemente por el bien y la salud
del país. Que así sea. Ojalá se equivoquen los que sostienen estas hipótesis.
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A tal punto es el desprestigio del Congreso de la República que, de un tiempo a esta parte, circulan memoriales
en las redes sociales solicitando la
reforma total de este poder del estado.
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Lo que de entrada se pide que los
parlamentarios sean asalariados solamente durante el periodo que hayan sido
elegidos pero, sobre todo, que no tengan jubilación de por vida. En la
actualidad, cierto es que luego de
ejercer un periodo tienen derecho a percibir, a diferencia de los demás
ciudadanos, un sueldo de promedio alto por el resto de
su existencia. Un privilegio singular e inaceptable.
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También tienen otras gollerías de
Perogrullo. Como es el seguro de salud completo y con una serie de
protecciones. Completamente distintos a los de la mayoría. Por todos estos
hechos, la población se inclina a que acaben estas singularidades. No puedo ser
posible tanta prebenda.
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La violencia es pan de todos los
días en la Venezuela de Nicolás Maduro, que sigue viendo el pajarito chiquitico
del alma de Chávez como una vez tuvo el cuajo de declararlo ante la prensa,
según la versión de una amiga que nos escribe desde tierras llaneras
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En esta oportunidad, el último
martes, se registraron en Caracas las muertes de tres delincuentes chavistas
que se enfrentaron a balazos con la policía. Adicionalmente, a una mujer, golpeada salvajemente, la llevaron a la
Maternidad Concepción Palacios donde también perdió la vida.
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A las fuerzas de choque delincuenciales
que protegen al Gobierno se le paga con dinero contante y sonante que salen de
las arcas del presupuesto público del Estado. Esta denuncia la ha hecho el ex candidato
presidencial. Henrique Capriles. Los chavistas
hacen barbaridad y media. No puede ser. (Noé)
Edgardo:
ResponderEliminarRealmente interesantes y oportunos tus puntos de vista, respecto a los últimos acontecimientos políticos y judiciales.
Como solía decir don Carlos Patiño, jefe de policiales de Ultima Hora: "Estás en la pomada".
Fuerte abrazo.
Roberto