Era uno de esos políticos que en
la actualidad ya no se ven por la constancia de sus cualidades demostradas a lo
largo de su fructífera vida. Menos en la inmundicia actual del Congreso de la
República, del cual en una oportunidad formó parte. En condiciones,
evidentemente, distintas. Las de la brillantez y el encandilamiento. Honesto,
capaz, estudioso e intuitivo con sólidos principios para actuar y consecuencias
demostrables de acierto. Uno de esos profesionales eficientes que realmente
valían. Abogado por sus cuatro costados, conocedor e intérprete de las leyes,
especialista en asuntos tributarios, económicos y electorales. Amante
permanente de la libertad, con antecedentes y consecuentes probados por completo.
Lo que lo hacía, definitivamente, un prominente personaje que ha dejado huella
y que por obligación tenemos que admirar.
Se trata de Juan Chávez Molina, quien lamentablemente con más de 90 años
admirables a cuestas vividos con decencia y transparencia permanente, ha dejado
de existir hace poco. Nacido en Arequipa y de prominentes familias puneñas por
angas y por mangas. Un efectivo señor doctor de la ley que contribuyó, por
donde se le mire, al fortalecimiento de la democracia peruana.
Juan Chávez Molina cuando integraba el JNE (Foto Caretas)
Juan Chávez Molina cuando integraba el JNE (Foto Caretas)
Senador por Puno de 1956 a 1962,
formando parte del Grupo Parlamentario de la Democracia Cristiana, partido que
lo contó como uno de sus fundadores. Luego de intervenir valientemente en las
jornadas cívicas arequipeñas de 1950 y 1955, en contra de la dictadura de Odría.
Superintendente Nacional de Contribuciones durante el primer gobierno de
Belaúnde y miembro del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), representante del
entonces, y no como ahora mediocre, Ilustre
Colegio de Abogados de Lima. Allá
por 1989 hasta 1993, con una constante incólume: defender, a
capa y espada, las decisiones soberanas del pueblo.
LA MEJOR BANCADA
La bancada de esa agrupación en la cámara alta desaparecida indebidamente
hoy por efectos de la Constitución de 1993, actuaba en el campo político dentro
de una férrea y consistente oposición al gobierno conservador y retrogrado de
Manuel Prado Ugarteche. Enarbolando las
encíclicas papales con ideas terceristas de condena al capitalismo y al
comunismo. La integraban además: Mario
Polar Ugarteche (Arequipa), Julio Ernesto Portugal (Arequipa) e Ismael Bielich
Flores (Lima)
Mientras que en el hemiciclo de
los diputados brillaban, entre otros: Héctor Cornejo Chávez, Roberto Ramírez
del Villar, Jaime Rey de Castro, Javier de Belaúnde Ruiz de Somocurcio, Jorge
Bolaños, Mario Alzamora Valdez, Roger Cáceres Velásquez, José Barreda Moller y
Julio C. Luque. Para tirios y troyanos, la mejor bancada parlamentaria de los
últimos 68 años, de 1945 a la fecha.
Defensor infatigable de lo justo
y lo correcto por convicciones profundas demostradas infinidades de veces y con
constancia que de por sí, ya es una virtud encomiable en un Perú donde
precisamente, en determinadas etapas de la historia, no priman ellas. Hay que
reconocerlo para superar escollos y ser cada día mejores como, precisamente,
Chávez Molina. Hijo de Mariano Chávez
Eguiluz y de Clorinda Molina de Chávez. Hizo sus estudios de Derecho en la
Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa.
ONCE ELECCIONES
En el país ocurrieron once actos
electorales cuando fue miembro de ese organismo. Muchos de ellos, además, por
primera vez. Entre los que destacaron el referéndum para aprobar la
Constitución de 1993. Pero lo cierto y concreto que todos esos eventos de
carácter cívico dieron lugar a medio centenar de votos enteramente opositores,
con fundamentos precisos y fundados legalmente en contra, de parte del
probo abogado. Alto, delgado con voz gruesa, lector empedernido y un
enternecido amor por el Perú.
El jurisperito hizo un recuento
de sus apreciaciones en un libro de tres tomos que salió a luz bajo el título: “Mis Votos Singulares. Historia de un
fraude que no debe repetirse”. Anteriormente, le propusieron ser Presidente del JNE y él en ningún momento se
nubló con la oferta, siendo claro al afirmar: ¡Primero se cumple la ley”!. En
pleno fujimorato, Vladimiro Montesinos Torres, muchas veces, lo tentó por
interpósitas personas. Pero él siguió firme y sobre todo independiente,
consecuente con la verdad.
Consideró consistente que tal
nombramiento era un golpe de estado. Lo llamaron sólo a él y no a los otros miembros
que en total eran 7 vocales, los que, dicho
sea de paso, estaban esperando en la sala contigua al Premierato. Los
gobernantes querían la traición y la sacadera de vuelta. Chávez Molina, por
supuesto, no se prestó-en ningún momento-al juego tan poco serio y menos
coherente.
Padres, hijos y nietos: Juan parado al lado de su madre.
Padres, hijos y nietos: Juan parado al lado de su madre.
GOLPES
Le dijo al Primer Ministro de aquel entonces
durante el primer gobierno de Alberto Fujimori, Oscar de la Puente, quien fue
el que le ofreció el cargo: “Ustedes ya golpearon el 5 de Abril y quieren que
yo de otro batacazo en el JNE”.
El Premier de la Puente le
contestó: “No hay ningún golpe de estado. Eso no está en la Constitución, sino
en la Ley Orgánica y una ley se cambia por otra ley, de manera que usted puede
ser designado”.
Muy seguro, el ex parlamentario
afirmó: “Están completamente equivocados. Para yo ser Presidente del JNE
tendría que haber sido vocal supremo y
elegido por este último organismo. Nunca he tenido ese cargo. He sido senador, soy
abogado y represento al Colegio de Abogados. Nada más”
“De manera que-añadió- eso, que me proponen,
va contra la Constitución”. Que tal respeto a las leyes vigentes del país a las
que muchas veces ni siquiera se les hace caso. La trasgreden a cada rato. Como el pan de cada día.
VIRTUD
En eso, precisamente, eran especialistas los
integrantes del gobierno que inició sus actividades en 1990, con el ex rector
de la Universidad Agraria al mando de la nación, el mismo que se convirtió en
un dictador autoritario de la peor especie y encima con una cleptomanía de robo
desenfrenada, aliado con su socio Montesinos.
Casi siempre lo que ocurre aquí en el país desafortunadamente,
con frecuencia y facilidad, es que se aceptan los cargos dentro de una viveza total y después se cura el entuerto con
ciertas capas de legalidad. El abogado arequipeño era la excepción y la
decisión se convirtió, definitivamente, en una virtud. En una hazaña total.
Dicho esto sin ninguna hipérbole o exageración. Tal como fue la realidad y como
se presentó.
Los fujimoristas tan poco
transparentes insistieron e insistieron. Querían encontrar tontos útiles.
Entonces, lo quisieron nombrar por intermedio de la Corte Suprema. “¿Cómo usted
tiene los votos de dicho organismo en su bolsillo”?, preguntó el abogado al Premier de la Puente.
“No-le contestó- hay maneras de
hacerlo”. Claro que si tenían al gángster Montesinos que ejecutaba lo que le venía en gana en el
Poder Judicial con su títere, el magistrado Alejandro Rodríguez Medrano. La
corrupción en su mayor expresión
El abogado probo le expresó a su
interlocutor un rotundo no, rechazando otra vez el puesto que le proponían.
“Entonces usted-le dijo de la Puente a Chávez Molina- da cuenta a sus
compañeros". El representante de los abogados volvió a demostrar entereza y
decencia: “Yo no tengo nada que decirles y ni siquiera los he convocado. Eso es
atribución del Premierato". Entonces, la autoridad gubernamental hizo pasar a los otros vocales y les dio a
conocer que el presidente en ejercicio del JNE había sido destituido y cesado
por el Gobierno.
ILEGITIMIDAD
Después vino lo del Congreso
Constituyente Democrático (CCD) donde no se publicó su voto. De acuerdo a lo
que sostenía Chávez Molina, esa elección se terminó sin concluir los
escrutinios. No habían llegado los votos del extranjero.
Los fujimoristas decían que no había
que esperar esas remesas electorales. Para el ex parlamentario, el argumento
era válido en cuanto que uno podía ser destronado de ser constituyente. Pero el
problema estaba en que los votos se suman para ver quien ocupa la
presidencia y, los del extranjero,
podían significar mayor porcentaje para cualquiera de ellos y le daba el
derecho de presidir el Congreso.
Por eso Chávez Molina, decía, argumentaba y repetía que
Jaime Yoshiyama Tanaka nunca debió presidir ese
poder del estado, porque su elección había sido ilegitima. Allí, para
él, se pusieron las cifras que les convenía.
Muy pequeño con sus hermanas Rosa y Leonor.
Muy pequeño con sus hermanas Rosa y Leonor.
FALSEDAD
Los sucesos más alucinantes
ocurren la última sesión del JNE a fin de ver quien ganaba el referéndum. El
escenario era el siguiente: se había votado a través del mecanismo por el “SI o
por el “NO” para aprobar la Constitución.
Lo real es que se presentaron
recursos de nulidad respecto de las votaciones en Puno, Ayacucho, Lima y
Arequipa. El Ejecutivo exigía, a cada rato y constantemente, los resultados con
una premisa falsa: “reducir el tiempo necesario para garantizar la pureza del
sufragio”
Según el proceso legal que
tipificaba la ley, el JNE debía resolver
los resultados del referéndum del 31 de Octubre de 1993 y dar su
veredicto final e inapelable. De esta votación se publicaría una resolución con
la cual si ganaba el SI, el CCD
remitiría el proyecto de la Constitución al Ejecutivo para su promulgación. Si
ganaba el NO, el paso siguiente era hacer un nuevo proyecto.
Para tratar de salvar el
conflicto, el 10 de Diciembre de 1993 se
publicó en el diario oficial “El Peruano”, un supuesto comunicado oficial del
JNE según el cual las nulidades habían
sido resueltas y la victoria correspondía al SI. El texto decía también que
faltaba resolver 135 actas de los votos del extranjero.
Lo cierto es que no se había
resuelto nada y que Chávez Molina no tenía idea de tal publicación. El día 12
se anulaba tal comunicado por errores de tipeo. Para variar y en forma
inadmisible, las cifras publicadas en el comunicado anulado sin la autorización
de los vocales son las mismas con las que se publicó el triunfo del SI por el
JNE con nuevos vocales, meses después de la promulgación de la Constitución.
LIQUID PAPER
Los resultados estaban casi
empatados y una ley constitucional sin número exigía que se considerara
ratificada la nueva constitución si los votos por el SI superan a los del
NO. Ridículamente el voto de una persona
podía decidir el futuro
Pero había más irregularidades.
En efecto, se había denunciado la pérdida de actas del Jurado Departamental de
Arequipa donde los sufragios estaban tas con tas, equivalentes a
aproximadamente 2 mil votos.
Finalmente se decidió hacer el
cómputo del voto total arequipeño, teniendo como base los resultados que
emitiera el Jurado Electoral. Es decir votos por el SI, el NO, en blanco, nulos y el total acumulado.
La misión fue encomendada a
Chávez Molina. Los resultados llegaron vía
fax y el NO había ganado. Había una dedicatoria de por medio para el jurista:
“Con admiración y respeto”. Por eso el abogado arequipeño consideró que el
documento iba a ser mal interpretado y pidió otro dirigido al Presidente del
JNE, César Polack Romero.
INDIGNACION
El vocal Loli Márquez decidió esperar el documento.
Mientras que el Presidente se impacientaba porque quería concluir la sesión y
dar el voto definitivo. El vocal entró con el nuevo fax y sentenció: el SI ha
ganado. Sorprendido Chávez Molina observó el papel y se percató que este tenía
las cifras del SI y del NO escritas con máquina
de escribir sobre liquid paper.
El jurista arequipeño mostró su
indignación de inmediato y el fax que le habían enviado primero. La
falsificación había sido hecha en Arequipa, dijeron, como si el liquid paper
pasara con textura y todo, por el fax.
El ex parlamentario
exigió al Secretario, Silfredo Hugo Vizcardo, que se avise a la Fiscalía de la
Nación para denunciar el fraude. El Presidente y los demás vocales decidieron
irse, acusándolo de querer desestabilizar el Estado e incluso lo amenazaron.
Inexplicablemente lo consideraban a la altura de los terroristas. Qué locura.
La intimidación se cumplió cuando
su fotografía apareció en el diario oficial “El Peruano”, bajo el título: ¡Olvidemos
sus rostros! La vista gráfica junto a la del criminal y subversivo, Abimael
Guzmán, con el comentario preciso que textualmente decía: “Puso la nota negra
en el JNE”. Sin duda, las ordenes malévolas y mefistofélicas del inefable
Montesinos, a las que se prestaron los otros miembros del JNE.
Los vocales y su presidente, por
miedo a la multitud abigarrada afuera en las calles, exigiendo a gritos que no
se cometiese el fraude, se retiraron por la puerta falsa. Chávez Molina con
seguridad escribió su voto dirimente en
el que declaraba la nulidad del referéndum y decidió utilizar la principal: “No soy un delincuente para salir
por otra”, dijo. Como tenía que ser y como premio a la consecuencia, la gente
lo aplaudió sonora y largamente.
Explicando la problematica electoral (Foto Caretas)
Explicando la problematica electoral (Foto Caretas)
ACTAS EN EL CUARTEL
El 26 de Diciembre de 1993, Loli Márquez
murió de un infarto cerebral. El 29 del mismo mes se promulgó la Constitución en
Palacio de Gobierno con la rúbrica del Presidente de la República, saltándose
el proceso parlamentario, sin resolución del Jurado Nacional de Elecciones y
empleando las cifras de un documento apócrifo aparecido en “El Peruano”.
A Chávez Molina le pasaron el
dato que las actas faltantes se encontraban en un cuartel cercano al JNE. No se
podía hacer nada. Ni siquiera cambiarlas. El vocal arequipeño no pudo denunciar la situación inmediatamente por los
hechos convulsionados y controlados, totalmente, por la dictadura.
Antes de que se promulgase la
Constitución, apareció en “El Peruano”, un aviso que decía que el SI había ganado. Registrado,
allí en el texto, una supuesta oficina de relaciones públicas y una secretaría
del JNE. Sin firma ni sello.
CIFRAS
A los ocho meses de la
accidentada sesión y de la promulgación de la Constitución,
los nuevos vocales del JNE mandaron a publicar, por acuerdo de sesión, los
resultados.
Incluso a pesar de las irregularidades,
los cómputos finales mostraban al SI con un 52.24%. Le ganaba al NO que acumuló
47.76%. Había 4.68 porcentuales de diferencia. Ambos sumaban el 100%, a pesar
de los votos en blanco, los nulos y un ausentismo del 29% que fueron para
muchos resultados contra el SI.
Las cifras en el territorio
nacional, increíblemente, eran los mismos de la publicación anulada del JNE del
10 de Diciembre de 1993: SI, 3
millones 878 mil 964 votos. NO, 3 millones 545 mil 669 votos. En blanco, 215
mil 613. Los nulos 518 mil 274. Cuando todavía faltaba el fallo sobre nulidades
y el conteo de muchos votos.
Específicamente Chávez Molina
denunció el fraude, la contabilización de mayor número de votos que de sufragantes,
la falta de firmas de muchas actas, las impugnaciones y la coacción contra los
electores. Sin embargo, no se registró ninguna investigación. Ni para bien. Ni para
mal. La dictadura dominaba e imponía todo
Fue cesado de su cargo por
intermedio de la Novena Disposición Transitoria de la Constitución que a la
letra dice: “la renovación de los miembros del JNE se inicia con los elegidos
por el CAL. La disposición venía con nombre y apellido propio. Los del distinguido profesional.
El jurista continuó sus
actividades profesionales en su bufete como abogado empresarial y
financiero. Asimismo enseñando en las universidades diversos cursos de la
Ciencia Jurídica. Era un convencido de que los jóvenes se dediquen a la política para poder perfeccionar el sistema.
Lo mismo que de la existencia de los partidos, de forma consistente y plural.
En plena juventud antes de ser Senador.
En plena juventud antes de ser Senador.
ESTUDIO
Muchos años y hasta el final tuvo estudio
abierto. Una época al lado de otro jurista arequipeño de renombre, Jaime Rey de
Castro, en un edificio cerca de la Cancillería en pleno centro de Lima. Ese
inmueble, dicho sea de paso, sufrió un incendio de proporciones inimaginables,
habiendo salvado la vida muchísimas personas que vivían o trabajaban allí.
Pero también estudiando a fondo
la Constitución de 1993, llegando a conclusiones interesantes. Como por ejemplo
cuando dice: “La carta magna actual respecto al Poder Electoral se mantuvo en
una situación hibrida hasta 1995. Con salidas al paso y soluciones transitorias
que nada bueno traían”.
Recordó enfáticamente que el
sistema democrático recurre a la soberanía de los ciudadanos para acabar, definitivamente,
con los golpes de estado, como una prueba fehaciente de que es necesaria la
intervención del pueblo
TRIGEMINO
Abogó por modificar y sustituir el
título IV, Capitulo XIII de la ley de leyes a fin de aprobar un Poder Electoral
que siga los principios científicos, técnicos y jurídicos armonizados
coherentemente con las particularidades de nuestra realidad nacional. Cuanta
razón tenía.
Una resistencia total para salvaguardar, de
todas maneras, a la democracia atacada por los tentáculos de las dictaduras.
Casado con Edith Rada Jordán, con quien procreó dos hijos: Alonso y Alvaro
(fallecido). Una frase célebre que lo retrata de cuerpo entero: “Me tocan el
trigémino (nervio del cráneo) y salta la lava del Misti, aunque tengo el genio muy
tranquilo y alegre”. Un hombre de bien, de arraigadas costumbres cristianas
que, con su capacidad y lo hecho en su vida, fortalece moralmente al Perú. (Edgardo de Noriega)
Que vida tan admirable. Merece tomarla en cuenta. Cuanta virtud y honestidad. Quien actúa bien es recordado por la historia. Chávez Molina, el abogado, el jurista y el especialista, tiene un lugar preponderante en el recuerdo de todos los peruanos (Alfredo Malpica)
ResponderEliminarLas dictaduras son la lacra del Perú. Pero cuando surgen hombres de la talla de Chávez Molina, el Perú, realmente rejuvenece y entra por la senda del progreso. El personaje ha hecho cosas en su vida que merecen,definitivamente, respeto y admiracion. (Héctor Terjada)
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