Allí está completo, como
resultado concreto y profundo, un impactante estudio que dicho sea de paso no existía y esa parte de la historia estaba vacía e
ignorada. que ahora, gracias al esfuerzo realizado, si tenemos lo que abarca muchos
rubros y especialidades de importancia para un pueblo, una ciudad o un puerto
que se precia como tal. La publicación ha dado a conocer, a plenitud, la
geografía de la zona, aspectos de su economía, la historia del lugar promisorio
en sí mismo, con su cultura y sus tradiciones e incluso su culinaria y
gastronomía. El trabajo de haberlo escrito e interpretado es encomiable y, de
todas maneras, merece destacarse porque, por donde se le mire, se está
contribuyendo al desarrollo social y humanístico de una zona importante del
país.
Se trata de la aparición de un
libro, de 129 páginas, bajo el impactante título de ” Ilo Nuestra Tierra”, en impecable edición e impresión de lujo a
full color con fotografías relucientes, el mismo que retrata por completo a esa
localidad ubicada en la zona marítima más austral del país, frente al inmenso
mar del Pacífico y de futuro promisorio, cuyo autor es el renombrado profesor
que, precisamente, en ese lugar se
desarrolló profesionalmente, en la noble y sacrificada tarea de educar y formar
generaciones de niños adolescentes y jóvenes que mañana serán el futuro de la
patria, Edwin Hernán Adriazola Flores.
Adriazola, en la presentación del
volumen que escribió realizado últimamente en el Club Tacna con sede en Lima,
consideró que dicho lugar es hoy en día
una ciudad moderna, de calles amplias con un malecón que nos conecta al océano
terso y azul verdoso, con una población que ya bordea los 80 mil habitantes.
Edwin Adriazola contribuye al desarrollo con su libro.
Edwin Adriazola contribuye al desarrollo con su libro.
CRECIMIENTO
Remarcó que su crecimiento económico
y comercial es impresionante, incluso en
algunas actividades con mayor dinámica que Moquegua y otras poblaciones de la
región sur, con un crecimiento sostenido y con muchas expectativas colectivas
esperando que sean, de todas maneras, una realidad.
Consideró al terruño un puerto
moderno, sin los defectos urbanísticos que se pueden ver con cierta facilidad
en otros lugares. Puntualizó que esta ciudad mantiene cierta fisonomía de
puerto tradicional con casonas del siglo XIX, construcciones que se mantienen a
pesar del tiempo transcurrido.
También indicó que, en los
últimos 50 años, Ilo experimentó un sustantivo
cambio en su fisonomía hasta convertirse en importante y estratégico en el
contexto nacional y dentro de las expectativas internacionales que mantienen Bolivia
y Brasil. Sostuvo que la transformación no ha sido fácil, sino por el contrario
consecuencia de un conjunto de factores que se vinieron dentro la modernidad y
la prosperidad.
SITIAL
Recordó que en el camino quedaron
las calles polvorientas, las noches sin el aparato de televisión, las casas de
barro y caña, las pequeñas faenas de pesca, las impresionantes raimas cuando
los campesinos venían a recoger en sus gruesos mandiles las aceitunas sabrosas,
tentadoras y otras costumbres ya olvidadas o dejadas de lado por otras que
llegaron por la migración. Consideró que Ilo está ofreciendo y busca afanoso
ese sitial que la historia y el destino le tienen merecido a los pueblos que
son pujantes.
Afirmó que esta tierra, con su fisionomía
actual, puede ser considerada entre las cuatro mejores ciudades del Perú con
mejores condiciones de vida, después de Lima, Trujillo y Arequipa, según un
estudio realizado por la revista especializada y de prestigio, “Perú
Económico”.
Subrayó que hace 10 mil años se
asentaron los primeros habitantes en la zona, dando inicio al proceso cultural
que tuvo su punto culminante en el desarrollo de la cultura Chiribaya. Ahí
surgió el tejido, la cerámica y los primeros indicios de la pesca, el pastoreo
y la domesticación de plantas que hizo del valle una despensa para una
población significativa.
Adriazola destacó que a esta
etapa le secundo la presencia inca y desde 1539 la española que definió la
vocación olivícola del valle, con los molinos de tracción animal y la nueva
cultura hispánica como patrón de dominación.
Ilo: puerto promisorio
Ilo: puerto promisorio
NIETO
Dijo que vino la Emancipación y
se aportó con Domingo Nieto en la lucha de la independencia. Ya en la
República fue testigo de diversos
acontecimientos como las campañas a puertos intermedios, la lucha contra la
dictadura de Vivanco, el Combate de Pacocha entre el Monitor Huáscar y los
buques ingleses Sha y Amethist, favorable al navío peruano que tenía a bordo a
Nicolás de Piérola y la Guerra del Pacífico, agregó.
Indicó que la primera ubicación
de Ilo se hallaba un poco más al norte, hasta que el terremoto de 1868 obligó a
trasladar a la población a la zona actual. En el siglo XX, la migración
producida por la actividad minero metalúrgica definió la vocación de Ilo como
polo de crecimiento y oportunidades
Por eso es que Adriazola afirmó
que esto aportó nueva sangre y una primigenia forma de entender el crecimiento.
También con creces fuerza laboral, emprendimiento y el impulso que se necesita
para crecer.
Vaticinó que en los próximos años
deben desarrollarse diversos proyectos de importante significación económica,
con fuerte inversión privada. Entre ellos figuran: el nudo energético, la idea
de conectar Ilo con Bolivia a través de una línea férrea, el desarrollo de la
empresa Anglo American Quellaveco y la zona franca de Bolivia Mar.
La modernidad de la ciudad sureña
La modernidad de la ciudad sureña
INVESTIGADOR
La gastronomía del lugar también
apareció en las páginas del libro histórico. Como el ceviche, el perol de
mariscos, el encurtido de pescado,, el chicharrón de pulpo,, la parihuela, el
chupín y el chactado de pejesapo, el charquicán de pescado, el pulpo al vino,
el picante de mariscos y de camarones, los cuyes fritos y los chicharrones.
El Profesor Adriazola es un
permanente investigador de la historia ileña. Nació el 20 de Noviembre de 1959.
Estudió en el Jardín de la Infancia N° 157, la Escuela 974 y la secundaria en
el Colegio Daniel Becerra Ocampo. Cursó la carrera de Educación en la
Universidad Católica “Santa María” de Arequipa.
Ha ejercido la docencia secundaria en el Colegio Américo
Garibaldi y actualmente es profesor en otro de ellos, el Enrique Meiggs, cargo que viene ejerciendo
hace 29 años. Ambos planteles están ubicados en el distrito de Pacocha, con su
capital Pueblo Nuevo, en las instalaciones del campamento minero metalúrgico de
la empresa mexicana, Southern Perú
Autor de varios libros como
“Apuntes para Una Historia General de Ilo”, “Domingo Nieto, Genio y Figura”,
“Domingo, el Nieto que Llegó a General” e “Historia del Perú 6to de Primaria”.
Un entendido en estos campos del saber y enseñar. Congratulaciones por el
libro.
Edgardo que bueno que te acuerdes de Ilo donde viviste profesionalmente y tiempos memorables de entrega a la mineria y la descentralizazion. Te extrañamos. Pero te leemos. Tito Córdova
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