viernes, 18 de febrero de 2022

CLARO...CLARISIMO

Pareciera ser que la actual crisis, que se ha convertido en una de las peores que ha vivido el Perú a lo largo de toda su historia generada por el Presidente Castillo y sus singulares adherentes torcidos al pensamiento digno e incluso seguidores del terrorismo, se solucionaría dentro de poco.

·          

Ello con la salida en los cargos del propio sindicalista violento e inepto que desempeña la primera magistratura de la nación y de la convenida Vicepresidenta y actual Ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Dina Boluarte, aliada a carta cabal del “lápiz”. También, para bien del Perú se irían a sus casas, los parlamentarios, mediocres en su gran mayoría. Todos ellos integrantes, dicho sea de paso, del Congreso de la República.

·          

Se trataría de renuncias en el Poder Ejecutivo y convocatoria a elecciones generales en el Poder Legislativo, como lo manda una interpretación integral de la Constitución vigente. Lo cierto es que la ciudadanía viene expresando tal deseo a través de las encuestas que se han realizado últimamente. Lo mismo que en innumerables pronunciamientos que son una realidad, por efecto del descontento popular.

·          

Lo que se tendría que buscar, como complemento concreto de apoyo, son las protestas en las calles de parte de efectivos y expresivos sectores populares conducidos por verdaderos estrategas políticos, que tengan mucho tino y respeto por la ley para evitar cualquier tipo de excesos.

·          

Conductores como lo fue Fernando Belaunde Terry que, en 1956, exigió la inscripción de su primera candidatura presidencial marchando por el centro de Lima, en plena dictadura de Odría. Acompañado de las masas que eran expresión genuina del pueblo, el líder de Acción Popular llegó hasta la Iglesia de la Merced ubicada en el Jirón de la Unión, rumbo a Palacio de Gobierno.

·          

Allí chocó con la Policía que trató de paralizarlo con potentes chorros de agua, salidos de las mangueras de los vehículos policiales denominados “rochabuses”. Con el encontronazo, había ocurrido un hecho de por sí histórico que los periodistas de la época denominaron el famoso “manguerazo”. Lo cierto y efectivo es que, al día siguiente, las autoridades electorales se vieron obligadas a inscribir la postulación del entonces joven líder de Acción Popular, con unos 43 años a cuestas

·          

Evidentemente que esta fue una hazaña política sin precedentes. Hoy en día necesitamos acontecimientos muy parecidas de índole enteramente genuino que salgan de las entrañas del pueblo para conseguir la verdadera democracia y la libertad plena, a fin de superar la tremenda crisis que nos aqueja.

·          

Sin embargo, en estos últimos días y hasta el 8 de marzo que será el día en que se decidirá la cuestión de confianza en el Parlamento, hay cierta tregua entre el Gobierno y la oposición del Congreso. Castillo, a su vez, ha solicitado que se adelante este acto parlamentario para el 28 de febrero. Veamos qué es lo que efectivamente pasa.

·          

Luego de tales plazos, la situación volverá a su normalidad y seguirá la lucha política de enfrentamiento total. Las alternativas de renuncia y/o y cierre del Congreso volverán a tener vigencia por un bien tiempo hasta que, por fin y para bien de todos los peruanos, se resuelva la problemática nacional

·          

Partamos del hecho que la aprobación del actual mandatario nunca ha sido superior a su desaprobación, de acuerdo a los registros de la encuestadora Ipsos. El mejor de ellos se produjo, en septiembre del 2021, cuando alcanzó un 42% de aprobación ciudadana. Pero, en ese mismo momento, su desaprobación se empinaba hasta el 46%.

·          

Desde entonces, la popularidad del Jefe del Estado fue disminuyendo y el rechazo creciendo, al punto de que un mes atrás, la primera estaba en 33% y la segunda en 60%. En solo cuatro semanas, sin embargo, lo que parecía una tendencia sostenida y preocupante se ha convertido en un desplome pasmoso.

·          

En efecto, la aprobación presidencial ha caído ocho puntos porcentuales y se ubica en un 25%. Lo que quiere decir tal mínimo porcentaje es que solo uno de cuatro peruanos respalda al Presidente de la República. El rechazo, entre tanto, ha subido al 69%. Lo que indica, a las claras, que casi siete -de cada diez peruanos- rechaza su forma de conducir el país.

·          

En esta ocasión, además, la disminución ha empezado a sentirse con fuerza en las zonas que solían ser bastiones de esta administración: el Centro (74%) y el Sur (46%) del país La caída, definitivamente, deja de sorprender y se debe, muy probablemente, a lo sucedido con el fugaz Gabinete Valer y la contumacia mostrada a la hora de confirmar el que preside Aníbal Torres.

·          

La factura ha llegada y hay que pagarla. No queda otra cosa que hacerlo. A siete meses de haber iniciado su mandato, el Presidente Castillo está tan debilitado que su estabilidad en el cargo es puesta en duda por propios y extraños. 

·          

Por eso es, precisamente, que se habla a cada rato de una renuncia (tema primordial de esta columna), una acusación constitucional que determine su inhabilitación o una vacancia por incapacidad moral permanente. Todas estas figuras están contempladas, por si acaso, en la Carta Magna vigente de 1993.

·          

Ahora bien, lejos de inducir al Ejecutivo a enmendar la plana y a enrolar a profesionales probos y competentes para encabezar los distintos sectores bajo su responsabilidad, solo ha inducido a sus voceros a victimizarse y a alarmar indebidamente sosteniendo, sin fundamento, que hay un golpe de estado en marcha. Nada de eso existe. Esta es una invención entera de los incapaces.

·          

La verdad, no obstante, es que las encuestas han registrado también que esas ideas tienen un lugar importante en la mente de la población. De hecho, un 56% de los encuestados dice que el Presidente debería renunciar, contra solo un 42% que señala que debería gobernar hasta el 2026.

·          

Cuando se pregunta por la actitud que tendrían los consultados frente a una moción de vacancia promovida por el Congreso, 36% declara que estaría, definitivamente, de acuerdo y 17% que “podría estar de acuerdo”, mientras que un 15% señala que no cree que estaría de acuerdo y un 30% dice que estaría definitivamente en desacuerdo. Un 2%, no opina.

·          

Cabe añadir asimismo que una mayoría de los sondeados (74%) se inclina por la opción que se convoque a las elecciones generales. Esto es presidenciales y generales en la eventualidad de que Castillo y Dina Boluarte fueran vacados o renunciasen, mientras que solo un 19% piensa que las elecciones a convocarse tendrían que ser solo presidenciales.

·          

Lo cierto es que el Gobierno cosecha lo que siembra. La caminata rápida hacia el precipicio, que efectúan los miembros de este régimen único y nefasto, es una realidad contundente que tarde o temprano llegará a su fin para bien del Perú. Que así sea.

·          

Ahora bien, al Jefe del Estado le ha dolido en el alma el bajón en las encuestas. No obstante, de que no cree en ellas y ha buscado, a su estilo, reinventarse. Como es usual en él, al hacerlo omite cualquier asomo de autocrítica y llena su estrategia de elementos llenos de victimizaciones. En sus ojos, la culpa de todo la tiene el Congreso que no lo deja trabajar. 

·          

Con eso, acercó al fuego una nueva galonera de combustible junto al flamante Presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres. Porque ese discurso de promover el diálogo para solucionar problemas se quedó apenas en un twitt institucional y en la nota de prensa publicada en el diario oficial “El Peruano”.

·          

En ese sentido, que Torres haya convocado últimamente a los periodistas para acusar de golpistas a las mismas personas a las que debe recurrir para pedir su confianza dentro de poco sugirió dos cosas. La primera, una absoluta falta de tacto político y la segunda, que en verdad no le interesaba obtener el voto de investidura.

·          

Posteriormente el Jefe de Gabinete llamó una “contienda” lo que se viene con el Congreso. Habrá que ver cuánto tiempo dura esa tregua. Recordemos que el Primer Ministro no es particularmente conocido por su pertinencia verbal.

·          

 Más bien, ha demostrado varias veces todo lo contrario. Lo peor es que esta no ha sido la primera vez que tiene que pedir perdón por las cosas que dice. El asunto es que el abogado no estuvo solo en la construcción de la narrativa y varios otros representantes del Ejecutivo se sumaron a compartir el mismo mensaje.

·          

Además del Presidente Castillo, el nuevo Ministro de Justicia, por ejemplo, señaló indebidamente que una vacancia del Presidente sería “atentar contra la democracia”. Mientras que la Ministra de Trabajo, Bettsy Chávez, presentó una denuncia constitucional contra la Presidenta del Congreso, María del Carmen Alva. ¿En qué quedará todo ello?

·          

No es que desde el Congreso de la República sean inocentes, ni las víctimas en esta historia. Los legisladores se han ganado a pulso que su aprobación sea incluso menor que la del Presidente. La crisis es compartida.

·          

Lo que ocurre con el Ministro de Transportes, Juan Silva Villegas, es inaudito. El Parlamento ha demostrado que no le interesa fiscalizarlo. Fueron 62 congresistas que se reunieron con el cuestionado representante del Ejecutivo y hay mucho de ellos que ni siquiera quieran firmar una moción de censura por razones que se desconocen. Nada bueno saldrá de este embrollo. El colmo de los colmos.

·          

Por su parte el Ministro de Salud, Hernán Condori, sigue firme en su puesto a pesar de que tiene acusaciones tremendas, actos también tremendos. Cura el cáncer en un minuto, sin ningún rigor científico, recomienda la famosa agua arracimada.  No puede seguir este improvisado, en tan importante sector, enteramente especializado. No nos olvidemos que todavía estamos sufriendo con la pandemia del Covid-19, que ha cobrado infinidad de víctimas y enfermos (Noé)

1 comentario:

  1. castillo no conduce nada, no sabe como, primero tendrian que enseñarle y ya sabemos que lo "natura no da Salamanca no presta"

    ResponderEliminar