Nadie escucha ya, en las redacciones, la voz gruesa casi de trueno de aquel hombre alto de piel cetrina que fue vehemente, peculiar y agresivo como pocos y que se entregó por entero a la apasionante profesión del periodismo, donde alcanzo inusual éxito.
Era todo un personaje destemplado cuando defendía con una fuerza inimaginable a los más sanguinarios dictadores que pasaron por la faz de la tierra. Para colmo de males, eso lo hizo infinidad de veces en declaraciones registradas por la prensa, la radio y la televisión que dominaba tanto.
Idéntica pasión desbordante inyectó a los polémicos noticieros de impacto que dirigió durante diez años en el Canal 2 de TV, aunque lo criticaron por sus métodos para muchos colindantes con el sensacionalismo y amarillaje.
Sin embargo, Ricardo Müller Montani, el negro Müller para sus amigos, fue un destacado protagonista de la comunicación con talento admirable que marcó un estilo efectivo en la historia del desarrollo de los medios de expresión hasta 1994, año en que desafortunadamente murió.
Ricardo Muller Montani
COMO ERA
En lo personal tuvo una faceta a lo largo de su vida que hay que revelarla si se quiere ser justos. Este caballero bravucón, gritón y respondón inclusive al sustentar sus ideas equivocadas, tenía tan solo una coraza de apariencia con el genio endemoniado que escondía lo que realmente era: el amigo leal y consecuente, con sólidos principios de honradez y lealtad.
No solo eso sino que con ese coraje y franqueza que le sobraban a borbotones se convertía siempre en el padre amoroso con sus hijos y en el periodista sentimental, preocupado por lo que acontece en este mundo convulsionado.
A Ricardo, desafortunadamente ya nadie lo escucha porque se fue para siempre a los 53 años al contraer una peritonitis, tras ser operado quirúrgicamente y morir de un fulminante ataque cardiaco.
Muchas horas, muchos días, muchos años compartidos en la redacción de Correo de Lima al trabajar juntos y estar al final de la jornada en los cafetines de Miraflores, distrito que lo vio crecer y hacerse hombre, donde charlabamos copiosamente.
Ni hablar de las noches bohemias gozadas a plenitud que finalizaron en alegres madrugadas, nada más y nada menos que en el mercado de La Parada, comiendo suculentos y sobre todo reconfortantes caldos de cabeza de carnero preparados al estilo serrano.
VIVENCIAS Y TRAYECTORIA
No se puede olvidar las visitas que hacía a mi casa de soltero en Chacarilla del Estanque para conversar con mi padre a quien mucho admiraba, sobre los últimos acontecimientos político al mismo tiempo que intercambiar ideas sobre distintos temas del famoso chismorreo limeño.
Tampoco las andanzas por Chorrillos, la playa de La Herradura, por Tacna y por Arequipa en busca de noticias como reporteros que les alcanzaba el tiempo para fugaces amores juveniles de citas iluminadas con el cielo estrellado. Mucho se vivió con Ricardo, aunque-desafortunadamente- ya no nos escucha.
En Correo, ubicado en aquel entonces en la vieja casona del famoso colegio de La Recoleta del centro de Lima, se cuajó como periodista al desempeñarse como reportero, comentarista y editor. Fue también varios años Jefe de la Página Comercial de ese matutino, experiencia que le permitió probar suerte poco tiempo en el mundo de la publicidad.
Instalaciones de Frecuencia Latina.
Después pasó por las agencias de noticias Latin-Reuter en Uruguay y Argentina y DPA de Alemania en el Perú. Su carrera la empezó en “El Diario”, un periódico de corta vida de don Pedro Beltrán que se dio el lujo de realizar la primera encuesta política en el país sobre las elecciones de 1962, con resultados acertados
La pluma de Müller, años después, engalanó Ultima Hora donde escribió la columna política “Reconstituyente” con el seudónimo de “Andrés Martín” el nombre de su hijo mayor. Asimismo fue el primer Jefe de Relaciones Públicas de la Corporación Financiera de Desarrollo (COFIDE)
A la televisión llegó en l984 para dirigir primero 90 Segundos y después Contrapunto. Su fórmula fue sencilla pero contundente para conseguir altos niveles de sintonía (ratings).
El aplicó lo que aprendió de sus maestros Raúl Villarán y Guillermo Thorndike en Correo hace más de 40 años: darle al lector y al televidente lo mejor de la noticia, sin mordazas ni convencionalismos. El triunfo que consiguió hasta morir no fue fácil. Muller para ello puso mucho oficio que, dicho sea de paso, también le sobraba.
A Ricardo lo seguimos extrañando mucho. Estas cuartillas son la prueba de ello. Lo recordamos siempre, aunque desafortunadamente ya no nos escucha...
Ricardo fue mi pata en el diario Correo. El loco se pasaba de franco y de amigo.Alonso Nuñez
ResponderEliminarCreo que el noticiero 90 Segundos que dirigio Muller marcó epoca en la televisión nacional. ¿Por que no se puede hacer una cosa igual o mejor? Diganme los expertos
ResponderEliminarSoy un amigo de Muller. Desde chico. Nos reuníamos en el barrio de Miraflores. Cerca a la calle Tripoli. El estudio en la Inmaculada y el Colegio Militar Leoncio Prado. Lo ví hasta cuando estuvo en Correo. Se pasaba el loco. Lo recuerdo mucho. Juan del Busto
ResponderEliminarHubo una época que Muller escribía en el suplemento dominical de Correo, Suceso. En esa oportunidad se presentó una ola delictiva fuerte en Miraflores. Tan sólo como lector recurrí a él y nos sirvió con una serie de denuncias periodísticas que significo, por un lado, que la policia actuase; y por otro, que la delincuencia parase. Buen periodista. No sabia que se habia muerto.
ResponderEliminarMe llamo carlos navarro y me quiero comunicar con su hijo CRISTOPHER MULLER, HE TRABAJADO CON EL MUCHOS AÑOS EN EL CASINO CRILLON Y NO LO ENCUENTRO POR NINGUN MEDIO, SE QUE OTRO DE SUS HIJOS TRABAJA EN CANAL 2, CUALQUIERA QUE ME PUEDA DAR REFERNCIAS DE CRISTOPHER ME PODRIA LLAMAR AL 987746261, canavarrov@yahoo.com, FUIMOS GRANDES AMIGOS, CUANDO LO BUSQUE EN SU CASA EN MIRAFLORES NO ME DIERON RAZON, SOLO SALIO UNA SEÑORA Y ME DIJO QUE NO LO CONOcE, ME PARECIO RARO.
ResponderEliminarhola yo los conozco a todos, le pasare tu email x
EliminarVengo de los Estados Unidos. Estoy tratando buscar a Ricardo Mueller, hijo de Elena Mueller Montani. Ella era mi tia abuela, hermana de mi abuelo Luis Montani Tudela. Si me pueden dar mas informacion por favor escribeme a gianninalema@hotmail.com. Gracias
ResponderEliminarUn señor de altas aspiraciones
ResponderEliminarMi nombre es Gonzalo Solé .
ResponderEliminarLo conocí a Ricardo porque fuí su camarógrafo en el programa 90 segundos.Una persona admirable en el periodismo.
Exhsusto,Vehemente.Alterado
Peleador por lo que pretende:Obtener la Noticia de la forma mas resaltante.
Un Caballero Honorable, respetable con la verdadera intuición ,con la vena periodística a flor fe piel.
Un Gran Jefe ,nos hacia vivir la noticia en toda su dimensión hasta ponernos los pelos de punta.Lo recuerdo siempre con un aprecio y cariño muy grande ,algunas cosas aprendí de uno de los mejores Jefes que he tenido en Frecuencia Latina.A ser perseverante y correcto en la profesión que se profesa siempre llevandoles a la pantalla la verdadera información confirmada de lo que se percibe como noticia.
Descansa en paz querido Ricardo.
Buby, así lo llamábamos cuando estábamos chiquitos y jugábamos a la pega o a la gallinita ciega. El vivía al frente de nuestra casa en la calle Triípoli. Recuerdo nuestras guerras con globos de agua en carnaval. Era muy buen amigo. Luego de haberme ido del Perú lo ví esporádicamete en mis visitas a Lima, él siempre franco, simpático, elocuente, lleno de sentido del humor.... Si es que es cierto que hay otra vida después de esta, él es una persona con quien yo quisiera reencontrarme.
ResponderEliminarBuenas tardes soy la segunda ex esposa de Ricardo ... Christopher vive en Lima y Andrés vive en Washington y yo soy su Madre que vivo en Montevideo Uruguay.
ResponderEliminarMucho gusto me da que se haya comunicado con nosotros la segunda esposa de Ricardo Muller, un periodista polémico con quien tuve una larga y estrecha amistad. Le pediría a la señora, como un favor muy especial, lo siguiente: que le enseñe,a los hijos del comunicador, esta semblanza que se hizo con mucho afecto de amigo y colega. A Ricardo, que se fue prematuramente,lo recordamos siempre. Y a su familia, por ser consecuentes con lo que el quiso, le deseamos lo mejor de aquí para adelante. Que así sea.
ResponderEliminarEn cuanto al articulo de homenaje a Ricardo Muller, la semblanza correspondiente también fue publicada en los diarios "Correo de Arequipa y de Tacna. Lo mismo que en el libro "50 Años de Periodismo Peruano", valioso volumen que sacó a luz, hace unos años, la Universidad Ricardo Palma y el Club de Periodistas del Perú
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