Hay coincidencia en que la corrupción es una tremenda lacra que
debe erradicarse por completo en el Perú. Tanto daño de índole moral y ético ha
hecho, a lo largo de la historia reciente, que ya estamos cansados de este mal endémico.
Urge dar ejemplo por el bien de las nuevas generaciones de peruanos.
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Pero los últimos acontecimientos no ayudan precisamente a ello. Muy por el
contrario, las alarmas vuelven a sonar y allí tenemos al principal
protagonista de los escándalos que hasta
ahora carecen de una explicación lógica
y por lo menos creíble: el ex presidente, Alejandro
Toledo Manrique, con sus truculencias financieras de por medio, acompañado de su suegra, Eva Fernenbug y su mismísima esposa Eliane Karp. Cual banda de mafiosos con
ramificaciones internacionales en Israel y Costa Rica
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Existe contante y sonante una cantidad exorbitante de dinero
invertido en inmuebles de lujo, de mucho mas de 4 millones de dólares, mientras
el empresario judío Joseph Maiman
sigue en las andanzas y nadie le cree nada de lo que ha hecho por ser de forma
enteramente oscura con sus empresas de dudoso proceder, como es el caso
de Ecoteva que opera en Centroamérica.
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Lo que Toledo dijo en el pasado, como verdad contundente, hoy se comprueba que precisamente es todo lo
contrario. Ahora resulta que también las
casas de su propiedad en Camacho y Punta Sal fueron pagadas con lo que comúnmente se denomina “plata negra”. De probarse
ello, el colmo de los colmos. Salud,
tres veces salud y a disfrutar en la playa...
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Aquí el problema es muy concreto
y ello es lo que precisamente hay que
aclarar, en la investigación correspondiente, con una simple pregunta: ¿De dónde salió el dinero para las grandes
inversiones de los Toledo con su suegra y porque tantos vericuetos en las
inversiones realizadas? La pregunta del millón que el ex presidente debe
contestar por el bien del país.
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Tal necesidad de conocer y saber
es la que exige la ciudadanía, a gritos, como necesidad
de índole transparente y coherente para recomponer la salud de la sociedad, en
los campos de la honradez y la decencia. Pareciera ser que todo cae en saco roto. El buen
Alejandro, si o si con pescaditos o sin ellos, no dice hasta ahora una sólo palabra, tras las últimas acusaciones.
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Más aún, cuando los reporteros lo llaman por teléfono en
busca de la obligatoria explicación que tiene que dar cambia su engolada voz
reconocible de inmediato y se niega por completo a dar siquiera una respuesta.
No puede ser. Aquí sí que hay algo raro.
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Lo que si se puede vaticinar que
el porvenir político del cuestionado personaje, amante de las mentiras y las
contradicciones, se truncará por completo. Al menos en las próximas elecciones
presidenciales del 2016. El desprestigio ganado impedirá, por completo,
cualquier figuración o postulación. Ello está más claro que la luz. Aunque, ya
lo sabemos, en política no hay desapariciones.
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Tal es el desbarajuste que sus
partidarios, los de Perú Posible, no saben qué hacer ni qué decir. Hasta ellos
están en el limbo y la preocupación constante de Luis Thais, el secretario
General de esta organización de la cual debe precisarse algo comprobado, por su origines y resultados: partido
político de ninguna manera es. Exclusivamente un club electoral de dudoso proceder.
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El lider del club un hombre que al
parecer se equivocó por completo y
habría ingresado a las filas de la corrupción. La gente se le va señor Toledo.
Qué espera para actuar. Sino pregúntele a Javier
Reátegui Roselló, quien ya está en sus cuarteles de invierno retirado de sus
actividades partidarias
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Lo mismo pasa con sus
parlamentarios como el General Daniel
Mora y José León, quienes no tienen
la menor idea de lo que efectivamente ocurre y esperan, desesperados, las instrucciones
que su dirigente principal está en la obligación de darles. Hasta ahora no hay novedades de defensa.
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La emergencia en el sur sí que es
preocupante por las fuertes nevadas que arrasan por completo poblaciones enteras, donde
la pobreza extrema reina por doquier. En Puno, hay 38 distritos de nueve
provincias en crisis total. Mientras que, en el Cusco, la situación también es muy deficiente con ocho zonas afectadas. Allí urge la
ayuda y el Gobierno está en la obligación de concretarla. YA.
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El Presidente Ollanta Humala viajó hasta Juliaca con
intención de llegar a una de los lugares más afectados, el distrito puneño de
Macusani. El objetivo era tomar acciones, pero no pudo arribar por el mal
tiempo.
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El problema está es que hasta
ahora no se sabe qué se ha hecho posteriormente. Aquí hay un acto de humanidad
estatal por cumplir, si se quiere ser consecuentes con las necesidades de los
que menos tienen y son los que sí la pasan pésimo y con estragos. No lo olvidemos.
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Hay un hecho que merece
recordarse frente a la situación deplorable. Todos estos fenómenos de la naturaleza que asolan al país pueden disminuirse con acciones tan necesarias de planificación concienzuda como parte
evidente de la prevención. Si
hubiese ello otro seria el cantar.
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Pero, como siempre, y en
constante espiral que es peligrosa, la improvisación nos gana y, lo que
es peor, nos deja con grandes problemas por resolver en zonas donde, precisamente, se vive bajo la desolación por efectos de la pobreza extrema imperante. No puede ser
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Lo que hace preguntar para qué tenemos organismos del estado
especializados en estas lides como el Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (CEPLAN) al que no se le da ninguna
importancia y menos protagonismo. La voluntad política de relanzarlo o crear
otros organismos de este tipo se
convierte en una necesidad inmediata y perentoria. Por supuesto que sin
burocracia
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Aquí tienen que entrar a tallar, como promotores, los gobiernos regionales
e incluso municipales que en muchos lugares del país, como las zonas afectadas,
si tienen presupuestos. Pero no los gastan por falta de obras y proyectos. La
del perro del hortelano: no comen, ni
dejan comer. Muy necesario es el diálogo y manos a la obra para solucionar problemas.
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El Presidente Ollanta Humala volvió indebidamente a quejarse de la prensa, exigiendo la necesidad de un equilibrio en los medios de comunicación. Le ha
molestado y llamado la atención que se diga y consigne que ocurrió un accidente
a 20 cuadras de su casa mientras los periodistas ponen, en vez de la precisión de la distancia, “cerca de la vivienda del
mandatario”.
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El argumento del Jefe de Estado medio simplón y, realmente, poco importante. Aplicando
un mínimo análisis, pareciera que el mandatario no sabe calcular las longitudes porque las expresiones de prensa calzan exactamente y, efectivamente, lo que sucedió está próximo. No tiene sentido hacer la salvedad. O es qué estamos locos. Cómo es. Si se tratase de algo crucial, el periodismo si que tendría que cambiar. No es el caso.
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Hay evidentemente otros problemas
que si debe tratar Humala con los medios para que, efectivamente, la
ciudadanía se entere de lo que efectivamente pasa en el país e incluso
determinar cuáles son los problemas de estado más álgidos. Urgente se requiere asesores de imagen y de prensa en Palacio de
Gobierno.Los podemos conseguir. Cuestión de que nos den la oportunidad...
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El Congresista Omar Chehade, de grata recordación por
sus metidas de pata en asuntos turbios e inconsecuencias como jurar por la carta
magna de 1979 y ahora presidir la
Comisión de Constitución , la de 1993 que el mismo invalidó, está en la picota
otra vez.
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En efecto, el Ministerio Público le puede reabrir de oficio una
investigación para determinar cuáles fueron las acciones realizadas y qué
personas podrían estar involucradas en el desalojo de la azucarera Andahuasi.
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En este asunto se habría registrado
tráfico de influencias, interviniendo varios peces gordos que se
dedicarían precisamente a ello con la supuesta anuencia del propio parlamentario. Lo que si
es un hecho comprobado es que a su hermano, Miguel Chehade, lo acaban de condenar, por el delito de cohecho
activo genérico, a tres años de prisión efectiva. Algo es algo. Que se sepa toda la verdad.
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Falta, eso si, la decisión de la
instancia superior. Cuando venga, las cosas estarán más claras. Mientras tanto,
el parlamentario permanece con la boca cerrada en este asunto. No ha dicho una sola palabra al respecto. Quien calla, definitivamente, otorga.
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Esta si que es una buena noticia.
La Procuraduría correspondiente logró embargar
2 millones de soles al ex empresario sentenciado por corrupción José Enrique Crousillat quien, para
evitar el pago de su reparación civil, cedió esta suma a su abogado defensor
Jorge Castro y éste a su vez, a Carlos
Paz y Pablo Documet Silva. Los corruptos se la saben todas.
Esta vez, felizmente, les cayó la quincha.
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Esta familia Documet si que tiene prontuario. Hace años, en los tiempos del
reinado de Montesinos comprando medios, actuaban
en varios diarios chicha que cumplían papeles nefastos en contra de los
opositores al régimen de Fujimori
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Uno de ellos era el famosísimo
diario “Onda” de su propiedad que fue dirigido por otro delincuente y hampón
llamado Augusto Bresani León, quien
con sus pillerías en la prensa hizo tanto daño y se lleno los bolsillos de
dinero mal habido.
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A propósito nada se sabe sobre la situación
legal del hijo de éste, Giorgio
Bresani Mier y Terán metido, como su
padre que murió hace algunos años, en infinidad de andanzas delincuenciales.
Tampoco del hermano Giancarlo que estaba en lo mismo.
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Ellos tenían su famosa oficina de
conexión directa al Servicio de Inteligencia Nacional de Montesinos (SIN) en el Pasaje Los Pinos ubicado en Miraflores. Que
nefastos tiempos aquellos. Felizmente acabaron. Los culpables y los que
están con temas pendientes ante la
justicia deben pagar, de todas maneras, sus culpas. No a las excepciones.
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De tumbo en tumbo va el que fue
el primer Ministro del Medio Ambiente de
este régimen, Ricardo Giesecke Sara
Lafosse. Lo acaban de sacar de Invermet a donde recaló, tras una pésima gestión en la Empresa Municipal de Mercados. En esta ultima organización se dice y
comenta que hay una corrupción de la madona, generada en el anterior régimen
municipal y continuada por la gestión de la señora Villarán.
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A dónde ira próximamente el
experto en basura que durante su gestión en el gabinete humalista era el que,
según aseguran fuente dignas de todo crédito, filtraba a los medios de comunicación documentos confidenciales y
clasificados de importancia vital para
el Estado. Lo que hacía tirar la
piedra y esconder la mano sin importarle a quien perjudicar, so pretexto de salvar
responsabilidades. Mal, muy mal. Eso se llama cobardía e infidencia. (Noé)
