jueves, 31 de marzo de 2016

HISTORIA DE LOS PREMIOS NOBEL

En su testamento, el industrial sueco  Alfred Nobel dejó ordenado a los albaceas que crearan un fondo financiero cuyos intereses se distribuirán anualmente en forma de premios a aquellos que, durante el año precedente, hayan proporcionado el mayor beneficio a la humanidad. Las distinciones correspondientes fueron otorgadas por primera vez en 1901 y, desde entonces, constituyen el galardón de mayor relevancia en el mundo.
Comenzaron a entregarse a partir de ese año en las categorías de Física, Química, Medicina, Literatura y el de la Paz. A partir de 1968, se estableció el premio en Ciencias Económicas. Hay distintos y diferentes organismos que entregan las distinciones.
En efecto, la Real Academia de Suecia es la encargada de nombrar al ganador de la primera especialidad. La Asamblea del Instituto Karolinska es la que premia a los galenos.  A la Academia Sueca le toca lo relacionado a creatividad literaria.
Todas las distinciones se entregan  anualmente, en una ceremonia efectuada cada 10 de Diciembre en Estocolmo, Suecia. El Premio Nobel de la Paz, en cambio, es elegido por el Comité Noruego correspondiente que lo concede en la capital de Noruega, Oslo.
Cada persona o institución laureada recibe una medalla de oro, un diploma y una suma determinada de dinero que es significativa. La del 2013 ascendió a los 8 millones de coronas suecas, equivalente a unos 874 mil euros, por cada ramo determinado.


Alfred Nobel industrial, inventor y filántropo

BIOGRAFIA
 Las condecoraciones no pueden otorgarse póstumamente. A menos que el ganador haya sido nombrado antes de su defunción.  Si el premio es compartido, la cuantía de dinero se dividirá entre los ganadores que no podrán ser más de tres personas.
Alfred Nobel nació el 21 de Octubre de 1833 en Estocolmo, Suecia, en el seno de una familia de ingenieros.  Cuando ya era profesional en este campo de la técnica compró Bofors, una empresa siderúrgica de hierro y acero que lo convirtió en un importante fabricante de armamento. Con su hermano Robert,  también estuvieron involucrados en negocios petrolíferos.
Hijo de Inmanuel Nobel y de Andrietta Ahisell.  A los 9 años se trasladó, con su familia, a San Petersburgo (Rusia),  donde su padre regentó una fábrica de armas que, dicho sea de paso, quebró. Tras volver a Estocolmo, con 30 años, el hijo creó su propia planta de nitroglicerina.
Lo hizo precisamente perfeccionando sus estudios sobre la inestabilidad de los éteres de ese producto, estudios con los que se jugó la vida al sufrir una peligrosa explosión que destruyó gran parte de su primera fábrica y provocó la muerte de su hermano Emilio.
Inventó la balistita que fue la precursora de muchos otros explosivos militares sin humo. Acabó amasando una fortuna, durante su vida, gracias a sus 355 inventos entre los que se encuentra, como el famoso, la dinamita.
LA DINAMITA
Descubrió la forma de manipular, de manera más o menos segura, la nitroglicerina y posteriormente la dinamita en el año 1867. Este producto fue rápidamente utilizado en los sectores de la construcción, los transportes y las obras públicas. Claro está, su potencial destructivo no pasó desapercibido para el mundo militar.
Los encargos de suministro de explosivos llegaban desde toda Europa y desde Estados Unidos. La patente sobre sus inventos lo dotó, cada día, de más dinero. Pero también se fue engendrando en él la idea de que la utilización práctica de sus descubrimientos (dinamita, balistita, gelignita) conllevaría a la aniquilación de vidas humanos, dado que los conflictos bélicos serían mucho más cruentos y devastadores.
Este complejo de culpa creció hasta que concibió la idea de destinar la mayor parte de su fortuna a incentivar los mayores esfuerzos del hombre en distintos campos de la ciencia, las artes o la diplomacia, cultivadas a favor de la humanidad.
En 1888, se sorprendió al leer su propio obituario al que se había titulado, “El mercador de la muerte ha muerto”, en un artículo que apareció en un periódico francés.  La nota se había publicado por error confundiendo a Alfred con su hermano Ludvig que, efectivamente, había fallecido.
El obituario se publicó, por equivocación, ocho años antes  de su muerte. Este articulo lo desconcertó y lo volvió aprensivo acerca de cómo  sería recordado cuando ya no esté en este mundo. El hecho en sí lo hizo cambiar su testamento para, efectivamente, ayudar a la humanidad.


Su testamento.

SAN REMO
Mientras germinaba la historia de los premios, el técnico  trasladó la sede de su principal negocio, su laboratorio y su hogar a San Remo (Italia), donde también residía la literata austriaca, Bertha Kinsky, la única mujer ligada a su vida
Su testamento lo firmó en París donde recogía, expresamente, la creación de la Fundación que llevaría su nombre.  El 10 de Diciembre de 1896, lamentablemente falleció en su residencia de San Remo.
La Fundación Nobel fue instituida, como una organización privada, el 29 de Junio de 1900. Su función principal gestionar de las finanzas y la administración de los premios. En buena cuenta, hacer crecer la fortuna para los indicados fines.
Tal organismo promueve internacionalmente las distinciones. Pero no se involucra en el proceso de selección correspondiente. Se desempeña como una sociedad de inversiones que usa su patrimonio, con el objetivo de crear una sólida base de financiación exonerada de impuestos. El 2007, sus activos alcanzaron los 3 mil 628 millones de coronas suecas (cerca de 560 millones de dólares).

Los diplomas del Premio Nobel

PREMIOS
Originalmente el Comité Noruego del Nobel designó a figuras prominentes como Jargen Lavland, Bjornstjerne Bjornson y Johannes Steen para dar credibilidad al Premio  de la Paz. Finalmente, otorgó las condecoraciones a dos destacados personajes del movimiento por la tranquilidad del mundo del siglo  XIX: Frédéric Passy, cofundador de la Unión Interparlamentaria y Henry Dunant, impulsor primegenio de la Cruz Roja.
El comité respectivo citó el trabajo sobre rayos catódicos de Philipp Lenard y el descubrimiento de los Rayos X por parte de Wilhem Rontgen, quien finalmente fue seleccionado. En el caso del campo de la Química se escogió a Jacobo van tHoff , por sus contribuciones a la dinámica, entre 20 nominados.
En  la Literatura se escogió al poeta Sully Prudhomme. Se registraron protestas en contra. Muchos querían como agraciado al novelista ruso Leon Tolstoi. El Premio de Medicina fue para el fisiólogo y microbiólogo Emil Adolf von Behring, quien desarrolló una fórmula para tratar la difteria que, por aquel entonces, causaba miles de muertes cada año.
En 1938 y 1939, el Gobierno de la Alemania nazi prohibió a los premiados-Richard Kunh, Adolf Butenandt y Gerhard Domagk- aceptar sus galardones. Ellos posteriormente recibieron la medalla, los diplomas.  En plena guerra mundial, como es obvio, no hubo distinción de la paz. La irregularidad duró hasta 1942, año que se reanudó anualmente.
MEDALLAS
El Sveriges Riksbank, el banco central sueco, donó en 1968 una importante suma de dinero para el premio en Ciencias Económicas que se entregó, por primera vez, a Jan Timbergen y Ragnar Frisch, por haber desarrollado y aplicado modelos dinámicos para el análisis de los procesos económicos.
Las medallas de los premios son acuñadas en Suecia y consideradas marca registrada. En el anverso llevan una imagen de Nobel y en el reverso comparten una inscripción en latín, destacando las exclusividades. La de la Paz cuenta sólo con una cinta aljusiva. Nada más
Hasta 1980 estos objetos eran acuñados en oro de 23 kilates. A partir de entonces varió al mismo metal, pero con menos valor (18 kilates). Cada una de ellos pesa unos 200 gramos y su diámetro es de 66 milímetros.
Los diplomas son entregados por el Rey de Suecia y, en el caso del Nobel de la Paz, lo hace el Presidente del Comité respectivo, en presencia del monarca de Noruega. Cada distinción de papel fino posee un diseño especial, donde se especifica el nombre del laureado y la causa por la cual fue conferida. La de la Paz jamás  ha contenido esta citación.

                     
                En Química ganó Jacobo H t Hoff

MONTO
El monto del premio económico depende de los ingresos de la Fundación Nobel. En el 2013, la suma ascendió  a los 10 millones de coronas suecas, algo así como  un millón de euros. La finalidad  de esta suma es evitar las preocupaciones económicas del laureado para que pueda desarrollar mejor sus trabajos del futuro. Sin embargo, no es raro que los beneficiados opten por donar el dinero  a causas científicas, culturales o humanitarias.
 Si en una categoría particular, dos personas comparten el premio, la suma se divide equitativamente. Si en cambio  se trata de tres ganadores simultáneos, puede repartirse en tres partes iguales o bien otorgar la mitad a uno de los laureados y un cuarto a los restantes.
A lo largo de la historia, cuatro personas han recibido dos veces el Premio Nobel en distintas fechas y años. Marie Curie logró, en el campo de la Física, el reconocimiento por sus extraordinarios servicios rendidos en sus investigaciones sobre los fenómenos de radiación y el de Química, por el aislamiento del radio y el ´polonio.

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Mario Vargas Llosa recibiendo el codiciado premio.

INSULINA
Linus Pauling obtuvo el de Química, por su investigación en la naturaleza de los enlaces de este tipo y el de la Paz, en mérito a  su activismo en contra de las pruebas nucleares terrestres. John Bardeen consiguió el de Física por la invención del transistor y, nuevamente, por la teoría de la superconductividad. Frederick Sanger  el de Química, por determinar la estructura de la insulina y también por la invención de un método para determinar la secuencia base del ADN
Por otro lado, dos organizaciones se hicieron acreedoras al Premio Nobel de la Paz, en más de una ocasión. La Cruz Roja, tres veces, teniendo en cuenta su trabajo durante las guerras mundiales y cuando cumplió su centenario en 1963. Mientras que el Alto Comisionado para los Refugiados (ACNUR) lo concretó en 1954 y 1981, debido a su férrea ayuda social proporcionada a la humanidad perseguida.
El Perú tiene, en su haber, un sólo Premio Nobel que le fue concedido, en 1910, al renombrado escritor Mario Vargas Llosa, en el campo de la Literatura. Hecho evidentemente que mereció el aplauso a nivel mundial. Vale recordarlo.

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