El televisor prendido a todo volumen emitiendo
información. Todo era actualidad. Los timbres de los teletipos que traían la noticia
internacional sonaban a cada rato, con las actualizaciones. El día era muy especial porque se había
conseguido una hazaña, sin precedentes, en el desenvolvimiento de la humanidad:
el hombre, por primera vez, había llegado a la luna.
El escenario no era otro que la
redacción del diario Correo, ubicada en la avenida Garcilaso de la Vega 1256
donde había funcionado el antiguo colegio SSCC de la Recoleta, en pleno centro de
Lima. La hora entre las 6 y 7 de la noche Se pasaba, evidentemente, por
momentos cruciales
Allí se preparaba una edición especial por tan
magno acontecimiento, ocurrido el 20 de Julio de 1969. El hombre pensativo
seguía en su labor. De pronto, recibía los cables, leía, consultaba con uno y
con otra hasta que después de un tiempo emitió un grito contundente, pero seguro:
¡aquí está el titular de la primera noticia para mañana. Y lo escribió en un
papelito cuadrado. ¡Eureka salió! La
hora del cierre ingresaba a sus últimos minutos. Ya casi se terminaba la
edición.
A Naranjo lo acompañó la calidad y la prestancia intelectual.
A Naranjo lo acompañó la calidad y la prestancia intelectual.
¡QUE TAL TITULAR!
Fallaban tan solo llenar la
primera página. Frente al grito, todos los reporteros que escribían levantaron
la cara y prosiguieron con la tarea Empezaron las conversaciones, los susurros
y las máquinas de escribir seguían sonando imparables. A cada rato y en toda ocasión.
Los editores lo miraron al creador de títulos
del diario, el famoso titulero de las noticias que salen cada día en los periódicos
y le pidieron, entre curiosos y sorprendidos, que les pase lo que había creado.
El hombre que era pequeño de estatura, pero talentoso del cerebro, reía. Estaba
alegre pero también tenso. Mando su titular sobre tan magno acontecimiento que
decía lo siguiente: ¡Buenos días señorita
Luna! Claro, preciso, contundente
El Jefe de Redacción, Jorge Merino Martínez, dio su
asentimiento. Mientras que el de Informaciones, César de los Heros Balbuena, preparaba impecable y claro el lead
de primera, teniendo como base lo que ideó el poeta. Hasta que el Jefe de Edición,
Julio Higashi López con su
tranquilidad constante y perenne, comenzó a diagramar. Al poco tiempo, la
edición estaba lista y pasó de frente a Talleres para su impresión.
En esos tiempos era Director del
diario, Roberto Ramírez del Villar,
quien-dicho sea de paso-aprobó y celebró tan magnifica entrada de la noticia
que, por esos tiempos de hace casi 51 años, fue uno de los sucesos más importantes
que marcaron efectiva época.
Al día siguiente eso es
exactamente, lo que leyeron en la noticia principal de la primera página, los
lectores de “Correo” que por aquellos tiempos tenía un tiraje respetable y un
prestigio sin precedentes. Una frase impactante, directa, de fácil lectura y
sobre todo poética. Es decir, bella por sus cuatro costados.
Naranjo y Calvo: amigos y colegas inseparables
Naranjo y Calvo: amigos y colegas inseparables
EL AUTOR
El autor no era otro que Reynaldo Naranjo García, el famoso
poeta de la generación del 60 que, desde aquellos tiempos, compartía sus
actividades de vate y versador competente lleno de premios y distinciones con
el de comunicador convincente y brillante, en un puesto que es uno de los más
difíciles del ejercicio del periodismo: ser el creador de los títulos de las noticias.
Lo que en argot de tal profesión se llama “cabecero” o titulero.
A eso y a la redacción se dedicó,
muchos años con éxito, tanto en “Correo”, “Expreso”, “La Crónica” cuando fue
transformada de, un día para otro, por ese gran organizador comunicativo que
fue Guillermo Thorndike. La hazaña duró un año entre 1974 y 1975 y ahí estuvo
Naranjo en el equipo de forjadores de noticias.
También tuvo una columna cultural
que sacó, con calidad por un buen tiempo, en la Revista "Caretas", siendo
responsable de la página que se dedicaba a difundir este tipo de actividades
tan importantes. Formó parte además de las redacciones de los diarios “Las
República” y “Hoy”. La Revista “Múltiple Cultura Peruana” lo contó entre sus
animadores, conjuntamente con el periodista y poeta de su generación, Germán
Carnero Roqué. Naranjo fue Director de otra publicación de este tipo
especializada titulada, “Talleres de Comunicación”, de gran aceptación entre el
periodismo y el público en general.
Hacia el 2004 editó el libro “100
Años de Jorge Basadre”, un merecido homenaje al gran historiador tacneño.
Cuatro años después, publicó una recopilación de manuscritos de poetas peruanos
guardados por Magda Figuerola y dados a él antes de la muerte de ella. El
volumen incluyó fotografías de Carlos “Chino” Dominguez.
Naranjo, Calvo, Garcia, Dominguez, Corcuera y otros
Naranjo, Calvo, Garcia, Dominguez, Corcuera y otros
MUERTE
En palabras del propio vate, este
libro era producto de 40 años de trabajo donde diez personajes, convocados por
Magda, compartieron excepcionalmente los mismos momentos y, sin darse cuenta,
formaron un circulo compacto de intelectuales de gran valor. Los manuscritos
fueron guardados celosamente por la curadora.
Lo recordamos al poeta Naranjo y
entristecemos con sentimiento desgarrado y profundo. Hasta ahora, ni siquiera,
nos convencemos que ha muerto a los 84 años, de un momento a otro, víctima de
un accidente de tránsito cuando un camión lo atropelló en el cruce de la
Avenida Benavides con La Paz. El deceso fue inmediato, según nos contó-entre
sollozos- su hija Gabriela.
Nos habíamos acostumbrado, con
Reynaldo, a vernos cada semana cuando sesionábamos como miembros de la Tertulia
“Humberto Castillo Anselmi”, durante las reuniones de los viernes en un
conocido restaurante de Miraflores.
Este grupo, creado hace siete años en 1913 lo
fundaron además de los ya citados, los periodistas: Domingo Tamariz, Justo
Linares Chumpitaz, César de los Heros, Jorge Sandoval, Hugo Chauca, Celinda
Barreto, José Vargas Sifuentes y otros hombres de prensa. Según Linares, en la
tertulia, el poeta “puso una cuota de notable enjundia, humor y memoriosa
narrativa de episodios de la vida intelectual, artística y periodística del
país”.
A Vallejo lo estudio a plenitud.
A Vallejo lo estudio a plenitud.
ZOOM
Lleva el nombre del mejor reportero que tuvo el país y que murió en agosto del año pasado. Por la pandemia, este grupo se reúne vía zoom electrónico. Allí, sus miembros reunidos, se enteraron de la fatal noticia. La tristeza y el llanto reprimido reinó entre ellos por completo.
Lleva el nombre del mejor reportero que tuvo el país y que murió en agosto del año pasado. Por la pandemia, este grupo se reúne vía zoom electrónico. Allí, sus miembros reunidos, se enteraron de la fatal noticia. La tristeza y el llanto reprimido reinó entre ellos por completo.
Naranjo, Cesar Calvo y el vate uruguayo Alfredo Zitarrosa, fundaron “La
Casa de la Poesía” en el distrito de Barranco. Mientras que, con Calvo y el
músico Carlos Hayre, grabaron el disco “Poemas y Canciones”.
Su libro “Júbilos” obtuvo el
Premio Nacional de Poesía, en 1965. Ha sido Jurado del Premio Casa de las
Américas del Perú. La noche está servida/Os invito la luz de los faroles/y esta
calle que se abre/en mis palabras/Para este día/Mi corazón como una luz
roja/rodando por la hierba mi pie/de solitario silbador/en este cuerpo que
anda/hacia vosotros/Para este día/yo he vivido años/Bebed de estos lugares /de
mi vida. /La enterrada vasija del estío/derrame su licor y esta dicha/de
compartir la tierra/Alzad la copa del amor/Canciones, sueños, hombres. (La
Noche está vacía)
Publicó un conjunto de relatos
bajo el título de “El Garabato Exacto”.
La Unesco le encargó la reconstrucción de los quince años de la vida de César Vallejo,
en vista de que fue un exhaustivo investigador del poeta universal.
Con los poetas de Hora Zero
Con los poetas de Hora Zero
OBRA
Su producción literaria, sobre
este tema, fue publicada en París a cargo de dicho organismo que pertenece la
organización de Naciones Unidas. Actualmente, el poeta tenía en desarrollo una
obra biográfica vallejiana, con documentación inédita.
Entre los libros que publicó
figuran: “Junto al Amor”, “Violín Desconocido”, “Las Manos en el Fuego”, “Los
Encuentros”, “Cuentopoesía”, “Historia de la Noche”, “Jubillos”, El Circuito
Invisible y otros. Este aire vacío/Este
gorrión inútil/que sobre mi hombro posa y acaricia/con silencioso pico, mi
alma/Ay hasta cuando/Hasta qué. / Al fin hasta que pájaro/ha de seguir
soñando/con rama preferida. /Un forado en el aire/era mi aliento herido. /Oh
prisionero/Fiel prisionero mío (Este aire vacío…)
Nació en Barrios Altos- Lima el 6
de abril de 1936. En ese distrito tradicional y tan limeño, su padre se
dedicaba al comercio y otras actividades de negocios. Allí el progenitor era
propietario de una serie de inmuebles y chacras como parte de su fortuna personal.
Reynaldo domiciliaba, desde hace muchos años, en la calle Colina del distrito
de Surquillo.
El poeta estudió en el Colegio Santo Tomás de
Aquino, la Gran Unidad Escolar Ricardo Palma de Surquillo y el Colegio Militar
Leoncio Prado. Luego ingresó a la Facultad de Letras de la Universidad Nacional
Mayor de San Marcos.
LOS DEL 60
Allí se adhirió al Frente
Estudiantil Revolucionario (FER) de orientación marxista. Posteriormente, el
intelectual abdicó de estas ideas y se convenció, de acuerdo a lo que nos dijo,
de que la democracia era la mejor forma de gobierno que tienen los pueblos.
Nunca perdió, eso sí, su idea de justicia social y la preocupación por resolver
los problemas de los más necesitados. Desenvolvamos/el
cuerpo de los padres./Sentados en el fondo/de la tierra/esperaron/Para nosotros
fueron envueltas sus miradas/Para nosotros fueron guardadas/vasijas y
cosechas/Para nosotros/fueron edificados/y derruidos/los hogares./Descubramos
el rostro/en que hemos de reconocernos./La poderosa mano/donde descansa/la línea
de la vida./El pie detenido, la voz/que idéntica a la nuestra calla./Toquemos
la misma piel/que viste/a los humanos cuerpos./Emocionemos/con nuestro propio
antiguo corazón/ Oh parientes de arcilla:/reunidos estamos/en la gran
ceremonia./El cántaro de la luna y el cántaro del sol/ mezclan el sagrado
licor/en nuestras sangres (Canto a los Fardos Funerarios)
La generación del 60 de Naranjo
estaba conformada, además, por los siguientes poetas: Javier Heraud, César
Calvo Mario Razzeto, Rodolfo Hinostroza, Arturo Corcuera, Antonio Cisneros,
Winston Orrillo, Luis Hernández, entre otros. Madre Adriana, buenos días/Es abril/En Grecia primavera/Y en el Perú
tal vez./Solo miro el suelo de la carceleta/y en el mis viejas islas y mis
mares,/pero alzó la mirada/y el encanto se rompe/contra el muro/idéntico a una
ola/Aquí no madre Adriana, no Euterpe, no Ismene./Mustio mi corazón, la peña
tiñe todo/y su color se extiende/como una mano/que va palideciendo/los lugares
que toca./A quien decir ya nada/si más que el mar/este idioma separa/A quien
que enseñe a Andreas/a partir/ De este dolor a Grecia,/de esta ventana a
Grecia,/Quien podría enseñarme a navegar (Júbilos)
Homenajeado por su impecable obra literaria
Homenajeado por su impecable obra literaria
SU CASA
A Naranjo, que era el menor de
ocho hermanos, le agradaba estar en Surquillo como sobreviviente de una
generación para la vida y la literatura. Allí, en su casa, en un barrio popular
de Lima, se dedicaba a escribir con comodidad. Ese inmueble lo compró su padre
al empresario inmobiliario Tomás Marsano. Su vivienda de Barrios Altos se había
caído, por efectos del terremoto de 1940 que asoló Lima.
Los dos últimos años, residió ahí acompañado
exclusivamente por su hija Gabriela Naranjo Barbarán, cuya madre “Moniquita”
como le decía el poeta, fue el gran amor de su vida. Ella se murió, con una penosa
enfermedad renal. “A mí me gusta vivir en un barrio. La gente es vital. Aquí
soy feliz”, decía Naranjo.
Ha estado en este distrito
incluso antes de que exista la mayoría de negocios luminosos que llenan estas
calles. Años en los que en lugar de las quintas y casas de dos o tres pisos que
se levantan a lo largo de las avenidas, se extendían tapiales y chacras de
japoneses. Desde donde se oía el metálico zumbido del tranvía.
A César Calvo siempre lo
recordaba y del gran poeta él decía: “Cesar y yo éramos como hermanos. Nuestras
madres se escapaban de sus casas para ir a nuestros recitales. Esto ocurría el
año 60 o 61”, si no me equivoco”.
MADRID
Quedó fascinado con Madrid cuando
viajó a Europa en su juventud. Allí conoció a Alan García, mientras estudiaba y
tenía posiciones medio progresistas. El padre de Reynaldo había sido aprista y
por eso bautizó a uno de sus hijos como Víctor Raúl, en honor al fundador del
Apra. La madre de García y la de Naranjo eran amigas.
Muy jovencito ingresó al
Conservatorio Nacional de Música. Cuando se le preguntó si quiso ser cantante, Reynaldo
le contó a un amigo lo siguiente: “Ni loco. Yo no quería ser militar, ni médico,
ni nada de esas cosas. Menos marchar. En la escuela te clasificaban según lo
que querían ser. Y en mi sección estaban los que no querían ser nada. Los vagos
Yo quería ser poeta. Esta es la pura verdad”.
A propósito, a los 21 años le
vino la desilusión y quiso quemar todos sus poemas en una hoguera. Incluso los
que escribió a los 8 años en el periódico mural “La Abejita” del Colegio Santo
Tomas. La desilusión duro poco y por eso los papeles se salvaron del fuego.
Pero con el correr de los años, todo lo de esta época lo perdió y no sabía dónde.
Obreros y cemento/curiosos
ingenieros/ingresen a la gran mezcladora/Mientras el ruido gira/va naciendo el
gigante/hijo robusto/que ha de crecer/hasta el veintavo piso/Danza de músculos/de
cerebros y días/ Nos pararemos/en el piso más alto/tal los conquistadores de
las altas montañas/Alzaremos los brazos/para tocar el cielo/y el flamante
ascensor/como nave dorada/nos dejara en la tierra/con las manos vacías/Tendrá
la burocracia/ Gerentes, policías, / padrinos y ahijados. Contratarán
porteros/y nos serán cerradas/las puertas que pusimos.
Celebran su cumpleaños los de la "Tertulia del Chivo"
Celebran su cumpleaños los de la "Tertulia del Chivo"
“LA CATEDRAL”
Allá por los años 70 para
adelante, los escritores Guillermo Thorndike, César Calvo, Reynaldo Naranjo y
Manuel Scorza decidieron vivir juntos en un departamento ubicado en un edificio
del sector principal de Miraflores, la Avenida Larco. A la vivienda la llamaron
“La Catedral” y allí estuvieron dedicados a la intelectualidad, la poesía, la
escritura y la narración. En la casa se respiraba, por lo que se hacía, de
entera peruanidad. Allí se planeó la fundación del diario “La República” y la
creación del conjunto de baile afroperuano Perú Negro, que después fue uno de
los más prestigiados del país.
El poeta, para hacer sus versos,
no creía en la inspiración. Pero si en el trabajo continuo. Lo primero, por
todos sus lados, le parecía una huachafada. Es falso eso de que hay que
drogarse para escribir, dijo en una oportunidad.
Luego agregó: “Borracho tampoco
puedes escribir. Esta actividad necesita todo lo contrario. Lo mejor es la
lucidez, la tranquilidad, el pensamiento permanente. (Naranjo dixit) Sus
palabras son celebres: “Ahora si termino el poema y todo salió bien, ahí si nos
metemos una gran bomba”.
Naranjo respetaba, por completo.
la vida íntima y privada de las personas. Como el autor de esta nota también
tiene esta convicción, le fastidia profundamente y también le afecta lo que le
pasó al poeta en los últimos años de su vida. Lo acusaron del peor de los
delitos sexuales en contra, de nada más y nada menos, su hija mayor y de otra
que era la hija de su compañera. Las habría violado, a las dos, cuando eran adolescentes.
La denuncia apareció tremenda y arrasadora, después de más de 50 años de que
los hechos habrían ocurrido.
Reynaldo con Moniquita y la hija de ambos: Gabriela
Reynaldo con Moniquita y la hija de ambos: Gabriela
LO MALO
Un informe periodístico
irresponsable y hurgador de asuntos-de por si controvertidos que ni siquiera
merecen la pena comentarse porque desgarran vidas, conciencias y actitudes-dio a
conocer la barbaridad. Incluso con testimonios de las que habrían sido las víctimas.
Algo contra natura y rechazable por completo. Ellas lo tenían guardado y decidieron
revelar las intimidades que aseguraban ser ciertas.
A una de las autoras, de la nota de investigación,
Gabriela Wiener, le faltaba inclusive catadura ética y moral para denunciar
situaciones de este tipo. En efecto, ella se define como amante del amor libre,
el bisexualismo y los tríos, en situaciones íntimas. Lo
decimos porque es la periodista-y no otra persona- quien lo ha contado en sus
columnas, declaraciones en la prensa e incluso en varios libros que ha
publicado sobre sus avances singulares en el campo de cupido.
La comunicadora, sin ningún
desparpajo, afirma que tiene dos amantes con los que vive: el poeta y
periodista limeño llamado Jaime Rodríguez y la música y activista madrileña
Rocio Bardají. Llama, a lo que practica, una relación “poliamorosa”. Pero ahí no
queda la cosa. Gabriela tiene una hija, Lena, cuyo padre es Jaime. Este a su
vez tiene otro vástago, de nombre Amaru, con Rocio. Los cuatro forman lo que
trata de llamarse una familia, de acuerdo a la versión de la Wiener.
Esta última le declaró, a la
periodista argentina, HInde Pomeraniec en el 2017, lo siguiente: “Juntos
experimentamos lo que se ha dado en llamar el “poliamor”, un matrimonio de tres
o una tripareja, como ha decidido bautizar Lena a esta experiencia huérfana de
referentes. Una cama de cinco plazas, varios cuartos para cuando decidan dormir
separados, un padre biológico de dos niños nacidos de los cuerpos de esas
mujeres y un viaje amoroso hacia lo que nadie puede adivinar cómo continuará al
día siguiente”. Increíble pero cierto.
Los poetas cocinando: Hinostroza, Calvo, Naranjo y Cisneros
Los poetas cocinando: Hinostroza, Calvo, Naranjo y Cisneros
TINIEBLAS
Evidentemente que Reynaldo negó,
por completo, todas las acusaciones y recurrió inmediatamente a la vía penal
judicial, entablando una demanda por difamación agravada entre otros delitos en
contra de todos quienes lo acusaron, según su versión, sin culpa alguna. Con su
muerte, ello que, de por si es execrable, se quedará en el mundo de las
tinieblas y de las interrogantes. Solo con los argumentos de las acusadoras.
Nunca se sabrá si los hechos fueran
verdaderos. A propósito, nadie enjuició en los tribunales al supuesto autor. Lo
increparon periodísticamente, sin pruebas contundentes. Tan sólo con los
testimonios de las supuestas agraviadas. Allí quedó la cosa y vino la censura
total al acusado, los agravios, los rechazos y los pedidos de sanciones
contundentes. El escándalo se había consumado.
El sufrimiento fue grande para el
poeta que incluso, por decisión de las autoridades oficiales, perdió el Premio
Nacional de Cultura. El mismo que ganó, legítimamente, por su producción
poética. Cuando ocurrió la revelación, nadie se dio cuenta de que aquí el
famoso principio del derecho de la presunción de inocencia está vigente y es
ley válida, hasta que no se pruebe lo contrario ante las autoridades correspondientes
del Ministerio Público y del Poder Judicial.
Muy joven aún
Muy joven aún
HOMENAJE
Esto último jamás ocurrió. No
bastan las declaraciones. Las mismas que tienen que ser comprobadas, por
completo, para poder juzgar y condenar. Todo esto en los tribunales de justicia
para tener validez. Lo único cierto aquí es que este personaje de la crónica es
vital para la Literatura peruana y el Periodismo nacional. Por eso destacamos
su accionar efectivo.
Queremos dejar claramente
establecido que, en ningún momento, avalamos el ataque a la mujer en cualquiera
de las formas habidas y por haber, las mismas que merecen de inmediato y por
convicción, el mayor de los rechazos.
Por eso mismo nos parece
conveniente rendir un sincero homenaje a ella como expresión genuina de vida y
condenar, por siempre, cualquier atentado, agresión, feminicidio, violación, asesinato
o ejecución de desaparición en su contra. Quien tiene o no tiene madre y le debe
lo que es, incluso si así no fuese, está en la obligación de hacerlo por
principio elemental. Quien tiene esposa o compañera, debe agradecerle su camino
juntos en las buenas y las malas.
Lo mismo si es padre de hijas que son la
columna vertebral de su existencia. De igual forma, si hay por ahí pequeñas
nietas que, a pesar de su corta existencia, pregonan vida fundamental de
cariño. Tal es mi caso y por eso lo pregonamos a los cuatro vientos: el respeto
total a este ser que es sinónimo de la bondad y el sacrificio, leyendo algunos
poemas impecables y valiosos de este vate que se nos fue de la vida, dejando
huella. Paz en su tumba en la inmensidad del otro mundo de Dios. Allá rumbo a
las estrellas en la eternidad. (Edgardo
de Noriega)
Humberto Castillo Anselmi,principal referente de La Tertulia y del periodismo peruano, viajó al infinito en agosto último. El próximo mes se cumplirá un año del penoso acontecimiento.
ResponderEliminarCasi seguro que el titular fue
ResponderEliminarBUENAS NOCHES,
SEÑORITA LUNA
además queda plenamente justificado, es decir tiene los mismos espacios arriba y abajo.
Hemos vuelto a revisar la edición del diario "Correo" de la fecha que el hombre llegó a la luna y el titular de la primera de primera es, conforme nosotros hemos afirmado, "Buenos días señorita luna" Lamento señalar que César de los Heros, al afirmar lo contrario, esta equivocado. Cuanto lo siento.
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