Como resultado de una alianza de
grupos conservadores, radicales antipersonalistas y socialistas independientes, el General
Agustín P. Justo llegó a la presidencia venciendo las tímidas esperanzas electorales de
Lisandro de la Torre y Nicolás Repetto. La “Concordancia” como se llamó el
aglutinamiento de esas fuerzas dispersas y en cierta medida desgastadas, se
encontró ante un cuadro político y económico
sumamente complejo.
Las deudas del país se habían
acrecentado en los últimos años como consecuencia de la crisis mundial de 1930
y la actitud proteccionista de Gran Bretaña ponía en peligro la exportación de
carne. En el orden político, las pasiones seguían desatadas con radicales aun enfurecidos
que atacaban a los grupos nacionalistas y el mundo se agitaba con las
revoluciones soviética, fascista y nacional socialista en medio de la conmoción
y el temor de una democracia liberal que veía peligrar sus reductos más
importantes.
La administración de Justo se
ocupó en primer término del desarrollo económico e intento mediante una misión que
encabezó el Vicepresidente Julio A. Roca, asegurarse el mercado de carnes por
parte de Gran Bretaña.
Agustin P Justo Presidente de Argentina.
Agustin P Justo Presidente de Argentina.
CONVENIO
La iniciativa culminó con la
firma del convenio Runciman-Roca,
mediante el cual se logró el compromiso de que el Reino Unido no impondría
restricciones a la importación de carnes vacunas enfriadas procedentes de la
Argentina, que redujeran esas importaciones a una cantidad inferior a la
importada en el trimestre correspondiente del año 1932.
El acuerdo se logró merced a
grandes concesiones que fueron posteriormente severamente cuestionadas. La
Argentina se comprometía a mantener libres de derechos el carbón y todas las
otras mercaderías que entonces se importaban
de esa forma,
Respecto de las importaciones
inglesas, sobre cuyos derechos aduaneros el Reino Unido gestionaba una
reducción, se trataba de volver a las tasas y aforos vigentes en 1930,
comprometiéndose el gobierno argentino a no imponer ningún nuevo aforo.
Era obligatorio seguir una política
de no reducción de tarifas ferroviarias. También obtener a favor del comercio
británico la totalidad del cambio proveniente de compras inglesas. Pero lo que
sorprendió e irritó a varios sectores de opinión fue la entrega al capitalismo
extranjero del monopolio del transporte automotor, por intermedio de la
Corporación de Transportes.
TRANSFORMACION
Paralelamente, el Presidente Justo encaró a través de su Ministro de
Hacienda, Federico Pinedo, una transformación en el sistema financiero
monetario y crediticio de la nación, implantó el impuesto a los réditos con el
objeto de aumentar los recursos del fisco y creó el Banco Central sobre la base
de las proposiciones y antecedentes que presentó el Banco de Inglaterra y
especialista internacional Otto
Niemeyer.
Argentina calcó un modelo
utilizado por Gran Bretaña en sus condominios y la medida fue resistida por un
vasto sector de la opinión pública. El convenio Roca-Runciman había provocado
la renuncia del Ministro de Hacienda, Alberto Hueyo y la clara protesta del
Senador Lisandro de la Torre, quien dijo al oponerse a su sanción: “Se permite
a los frigoríficos Vextey, Swift y Armour y a todos los frigoríficos
extranjeros que trabajen en esta tierra
conquistada, realizaciones de utilidad comercial, mientras se prohíbe a los
frigoríficos argentinos del presente y del futuro colocarse en las mismas
condiciones”
Pese a las resistencias que la
gestión económica de Pinedo suscitó, el juicio de algunos expertos subraya que
logró superar entre los años 1935 y 1936 la profunda crisis que estaba sumida
el país. Quienes así rescatan su gestión señalan que las reformas financiera,
bancaria y monetaria fueron hechas inteligentemente, se aprovecharon los buenos
precios de nuestros productos agropecuarios en el mercado mundial, se
fortaleció al fisco y se logró la revitalización de los negocios privados.
Saludando al puieblo
Saludando al puieblo
ACIERTOS
También se consigna en el saldo
favorable de este controvertido periodo de la política argentina el satisfactorio
funcionamiento del crédito bancario, el establecimiento de la Junta General de
Carnes, la Reguladora de Granos, la de Industria Lechera y la Reguladora de
Vinos.
Fue un acierto las creaciones de
Yacimientos Petrolíferos Fiscales, la Dirección Nacional de Vialidad y la construcción
de una amplia red de caminos en todo el país. Al frente de la intendencia
municipal, Mariano de Vedia y Mitre realizó una ponderable tarea de embellecimiento
de la ciudad. Por su iniciativa se abrió la avenida 9 de Julio y se habilitaron
nuevas plazas y paseos que adjudicaron signos exteriores de grandeza y
prosperidad.
Dificultosamente la Argentina
había logrado superar una larga y penosa crisis y mostró- a través de Carlos
Saavedra Lamas- una interesante postura en materia de política exterior que
merece párrafo aparte.
En efecto, bajo su inspiración,
Argentina adoptó una política independiente y disputó a los Estados Unidos el
liderazgo en América. Saavedra Lamas se propuso y lo logró terminar con la
Guerra del Chaco, entre Bolivia y Paraguay, obligo a USA a la doctrina de la no
intervención en los asuntos políticos internos de otros estados, en abierto
desafío a la doctrina Monroe e hizo regresar a la Argentina a la Sociedad de
las Naciones c on la siguiente condición:
Con sus mas cercanos colaboradores, rumbo a una reunión.
Con sus mas cercanos colaboradores, rumbo a una reunión.
CONFERENCIA
“Esta última república considera
la doctrina Monroe, mencionada como ejemplo en el artículo XXI del pacto, como
una declaración política unilateral que en su época rindió importantes
servicios a la causa de la emancipación americana y no como un pacto regional
según se afirma en el artículo en cuestión”
Por iniciativa del Presidente
Franklin Delano Roosevelt, se realizó en Diciembre de 1936 en Buenos Aires una conferencia interamericana
para la consolidación y el mantenimiento de la paz en América.
En esa reunión volvió a gravitar la tesis de la Cancillería
argentina que neutralizó los avances de la unión, tendientes a lograr dirigir
el panamericanismo, mediante un nuevo pacto que estipulaba la no intervención y
declaraba fuera de la ley “toda intervención diplomática excesiva”.
Saavedra Lamas había logrado detener
al coloso del Norte, le otorgó personalidad y color a la política exterior del
país y se adjudicó méritos para obtener el Premio Nobel de la Paz por su
oportuna gestión ante Paraguay y Bolivia.
Pese a haber formalizado la Ley
11729, que establece las indemnizaciones por despido, las vacaciones pagadas,
la ley que dispone el descanso obligatorio el sábado por la tarde llamado “sábado inglés y otras innegables mejoras
sociales, el gobierno de Justo comenzó a sufrir un evidente desgaste.
En la cúspide del poder.-
En la cúspide del poder.-
DEBILITAMIENTO
Las causas del mismo habría que buscarla más que en los resultados de su propia gestión, en el
debilitamiento de las fuerzas que lo llevaron al poder y en el surgimiento de
una vocación fuertemente nacionalista en
vastos sectores de la juventud y del Ejército
Los radicales que habían estado
marginados de la actividad pública
intentaron tomar el gobierno mediante un complot que fue descubierto en
Diciembre de 1932, configurándose a partir de entonces un inusual estado de tensión y alarma
Se suspendieron las garantías constitucionales
y muchos políticos fueron detenidos, enjuiciados y enviados a Ushuala, entre
ellos Marcelo T. de Alvear, Adolfo Guemes, Honorio Pueyrredón y Ricardo Rojas
Se reinstaló en el país la triste
y sombría práctica del fraude electoral mientras el General Justo puso la maquinaria
oficial electoral al servicio de quien fue su sucesor, el radical
antipersonalista Roberto M. Ortiz.
La fórmula que se completó con el
dirigente conservador Ramón S Castillo triunfó sobre las renacidas y
rápidamente malogradas aspiraciones de la Unión Cívica Radical que presentó a
Marcelo T. de Alvear-Mosca.
En tanto se extinguían lentamente
los socialistas independientes y el Partido Socialista limitaba sus apetencias
a obtener algunas bancas en el parlamento. El 20 de Febrero de 1938 asumieron
sus cargos Ortiz y Castillo y quedó atrás un régimen de contradictoria gestión
que marco su impronta en la modernización del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario